«La NASA continúa trabajando con todos nuestros socios internacionales, incluida la Corporación Espacial Estatal Roscosmos, para las operaciones seguras en curso de la Estación Espacial Internacional», afirmaba en un comunicado reciente la NASA, tras la invasión de Rusia a Ucrania en una operación militar ordenada por su presidente Vladimir Putin.

La exploración espacial sigue siendo un dominio militarizado, a pesar de la promesa de paz y cooperación que se supone que representa la ISS. Entonces, ¿qué ocurre con la ISS tras este dramático evento sin parangón en Europa?

 

Consecuencias para la estación espacial internacional

La estación espacial internacional es un proyecto modular formado por una colaboración multinacional entre cinco agencias: NASA, Roscosmos, JAXA, ESA, y la CSA.

¿Qué impacto podría tener el conflicto sobre Ucrania en la Estación Espacial Internacional?

​A pesar de las palabras neutrales de la NASA, Roscosmos no ha tardado en responder ante las sanciones de Estados Unidos contra la industria aeroespacial rusa por el nuevo conflicto bélico. Tras la invasión rusa de Ucrania, Dmitry Rogozin reiteró que aplicar nuevas sanciones contra el programa espacial de Rusia podría tener algunas consecuencias desastrosas para sus adversarios.

Biden ha impuesto una nueva ola de sanciones contra el país, con el objetivo de aislarlo económicamente del resto del mundo y socavar activamente el programa espacial ruso.

El director de la Agencia Espacial Europea, Josef Aschbacher, hizo una declaración muy neutral sobre la situación. Sin embargo, las sanciones del presidente estadounidense Joe Biden a Rusia han llevado al director de Roscomos, Dmitry Rogozin, a emplear las redes sociales, concretamente Twitter, para amenazar a Estados Unidos respecto a a su relación con la Estación Espacial Internacional. Rogozin, afirmó que Rusia está lista para retirarse de esta empresa conjunta; y, “sin Rusia, la ISS probablemente caerá sobre Europa, Estados Unidos o incluso India y China”, dijo en su tuit el director de Roscosmos, en una clara advertencia.

Mirá También:  El gato de Schrödinger: una paradoja cuántica que desafía el sentido común

 

 

 

Deja un comentario

You May Also Like

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *