Entre las muchas lunas de Saturno, el sexto planeta desde el Sol, Titán destaca como la más grande e intrigante. Ahora, un estudio dirigido por la astrobióloga Catherine Neish evapora nuestras esperanzas acerca de Titán, mostrando que el océano subterráneo de la luna más grande de Saturno es, muy probablemente, un entorno no habitable, lo que significa que erradicar toda posibilidad de encontrar vida en el mundo helado. Lo que, además, apunta a que tampoco es probable que encontremos vida en planetas del sistema solar exterior como Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno.
«Desafortunadamente, ahora tendremos que ser un poco menos optimistas cuando busquemos formas de vida extraterrestres dentro de nuestro propio sistema solar», explicó Catherine Neish, profesora de ciencias de la Tierra. «La comunidad científica ha estado muy entusiasmada con el descubrimiento de vida en los mundos helados del sistema solar exterior, y este hallazgo sugiere que puede ser menos probable de lo que suponíamos anteriormente».
Se considera que es muy poco probable que Titán albergue vida tal como la conocemos.
Un jarro de agua fría
La atmósfera de Titán está compuesta principalmente de nitrógeno, similar a la atmósfera de la Tierra. Sin embargo, también contiene una cantidad significativa de metano, lo que le da a Titán su particular neblina naranja. Pero este metano y otros hidrocarburos en la atmósfera crean una espesa niebla tóxica que dificulta que la luz del sol llegue a la superficie de la luna, lo que a su vez limita también procesos como la fotosíntesis, crucial para el sustento de la vida en la Tierra tal y como la conocemos.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores midieron la migración de moléculas orgánicas desde la superficie de Titán hasta sus profundidades oceánicas. Utilizaron datos de cráteres de impacto en la gran luna de Saturno. Basándose en las frecuencias estimadas de los impactos celestes en la corteza de Titán, los astrobiólogos calcularon la tasa anual a la que cometas de diversas dimensiones chocan con Titán a lo largo de su línea de tiempo geológica, de cara a pronosticar el volumen de agua enriquecida con materiales orgánicos que se transporta desde la superficie de Titán hasta sus capas subsuperficiales a lo largo del tiempo.
Descubrieron que el peso de la materia orgánica transferida de esta manera es bastante pequeño, no más de 7.500 kg/año de glicina, el aminoácido más simple, que forma las proteínas en la vida. Esta es aproximadamente la misma masa que la de un elefante africano macho: no es suficiente para sustentar la vida. El estudio determinó, por tanto, que es probable que el océano de Titán sea un «ambiente no habitable» debido a la falta de aminoácidos, que son componentes necesarios para la formación de la vida.
Se pensaba que el océano de Titán era capaz de albergar vida.
«Este trabajo muestra que es muy difícil transferir el carbono de la superficie de Titán a su océano subterráneo; básicamente, es difícil tener tanto el agua como el carbono necesarios para la vida en el mismo lugar. En el pasado, la gente a menudo suponía que el agua es sinónimo de vida, pero ignoraban el hecho de que la vida necesita otros elementos, en particular el carbono«, dicen los autores.
Así que a pesar de todas nuestras esperanzas, lo más probable es que Titán sea inhabitable. La combinación de su espesa atmósfera con, temperaturas extremadamente frías y falta de agua líquida hacen que la existencia de vida sea un gran desafío. Y disminuye drásticamente las posibilidades de descubrir formas de vida extraterrestres debajo de la superficie de otros mundos helados, como las lunas de Júpiter, Europa y Ganímedes, y la luna de Saturno, Encélado.
El océano de Titán tiene un volumen proyectado de más de 12 veces más grande que los de la Tierra
«Los resultados de este estudio son incluso más pesimistas de lo que pensaba en cuanto a la habitabilidad de la superficie del océano de Titán, pero también significa que existen ambientes prebióticos más interesantes cerca de la superficie de Titán, donde podemos tomar muestras con los instrumentos de Dragonfly», concluyen los investigadores.
La atmósfera de Titán está compuesta principalmente de nitrógeno, con algo de metano e hidrógeno. Esta composición atmosférica es notablemente similar a la de la Tierra primitiva, lo que despierta curiosidad sobre el potencial de la Luna para ofrecer pistas sobre el pasado de nuestro propio planeta.
El estudio determinó que es probable que el océano de Titán sea un «ambiente no habitable»
La espesa atmósfera de la luna, que es aproximadamente 1,5 veces más densa que la de la Tierra, alberga moléculas orgánicas complejas. Pero debajo hay un panorama muy interesante y complejo. A diferencia de la Tierra, donde el agua llena nuestros océanos y lagos, las gélidas temperaturas de Titán, que caen a alrededor de -179 grados Celsius hacen que sus lagos, ríos y mares estén llenos de metano y etano líquidos
La próxima misión Dragonfly de la NASA, cuyo lanzamiento está previsto para 2028 y llegará a mediados de la década de 2030, enviará un helicóptero similar a un dron para explorar los diversos entornos de Titán. Dragonfly estudiará la química prebiótica e incluso buscará signos de vida pasada o presente.
La glicina es el aminoácido más simple que se encuentra en los seres vivos.
Referencias:
- Catherine Neish et al, Organic Input to Titan’s Subsurface Ocean Through Impact Cratering, Astrobiology (2024). DOI: 10.1089/ast.2023.0055
