Implicaciones del descubrimiento

El asteroide Ryugu, que tiene una forma aproximadamente esférica con un diámetro de aproximadamente 435 metros, es importante porque se cree que migró desde el sistema solar exterior y conservó un registro más intacto de la nebulosa a partir de la que se formaron el Sol y los planetas posteriormente. Debido a su edad, el polvo y las rocas de su superficie, el asteroide ofrece a los científicos un vistazo espléndido a qué material flotaba en el sistema solar primitivo hace más de 4 000 millones de años. Es rico en carbono y las muestras son en su mayoría silicatos hidratados de grano fino, que en la Tierra llamaríamos arcilla, con depósitos de grano más grueso esparcidos a través de ellos.

A diferencia de las moléculas orgánicas que se encuentran en la Tierra, las muestras de asteroides de color negro intenso, que los científicos encontraron que solo reflejan del 2% al 3% de la luz que los golpea, no han sido modificadas por las interacciones con el entorno de la Tierra, lo que les da una composición química mucho más cercana a la del sistema solar primitivo.

«Detectamos varios compuestos orgánicos prebióticos en las muestras, incluidos aminoácidos proteinogénicos, hidrocarburos aromáticos policíclicos similares al petróleo terrestre y varios compuestos de nitrógeno», dijo Hiroshi Naraoka, de la Universidad de Kyushu en Japón, quien dirigió el equipo de investigadores. «Estas moléculas orgánicas prebióticas pueden propagarse por todo el sistema solar, potencialmente como polvo interplanetario de la superficie de Ruygu por impacto u otras causas».

 

Lo próximo

A medida que se analicen más datos de las muestras de Ryugu, obtendremos más información sobre la composición del asteroide y cómo se formó. Además, esta no es la única roca espacial bajo investigación. En 2021, la nave espacial OSIRIS-REx de la NASA recolectó una muestra de roca de otro asteroide, en este caso Bennu y, cuando la muestra regrese a la Tierra en 2023, se compararán ambos resultados y quizá podría darnos pistas sobre cómo comenzó la vida en nuestro planeta. Y con ello, existiría una buena posibilidad de que se hayan desarrollado formas de vida extraterrestres en otros planetas.

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