La falta de asistencia a los centros vacunatorios para recibir las segunda dosis contra la COVID-19 mantiene en alerta a las autoridades argentinas y provinciales y por ello en las últimas horas el gobernador Axel Kicillof confirmó la puesta en funcionamiento del anunciado pase sanitario. «Tenemos la vacuna, necesitamos que se vacunen», pidió en el marco del aumento del 33% de los contagios y la detección del primer caso confirmado de la variante Ómicron en el país.
En ese contexto, el Gobierno provincial decidió aplicar un pase sanitario que obliga contar con las dos dosis para asistir a eventos masivos, como actividades culturales, deportivas, religiosas, recreativas en lugares cerrados, trámites públicos ante organismos provinciales y gubernamentales y para privados en lugares cerrados. También será obligatorio para trabajadores que realicen atención al público, en entidades públicas o privadas, aunque la medida fue dispuesta desde la autonomía del Estado bonaerense.
Fue en la última reunión del Consejo Federal de Salud (COFESA) en la que se decidió avanzar con esta medida y las razones son simples: el fuerte ausentismo en la aplicación de segundas dosis y la calificación de la OMS de la variante Ómicron como «preocupante».
Aunque hubo algunas rispideces entra Nación y Provincia por la celeridad y el alcance de la medida, en el Ministerio de Salud bonaerense decidieron plegarse a la propuesta de las autoridades sanitarias argentinas para empezar a incentivar la vacunación.
En la cartera que conduce Carla Vizzotti aseguraron a Infobae, en tanto, que lo hablado es que cada jurisdicción tendrá la posibilidad de adelantar la medida o no, de acuerdo a sus necesidades particulares. Si bien la ministra de Salud de la Nación aclaró que en el pase sanitario discutido en el COFESA «no se incluye, ni el ámbito escolar, ni el ámbito laboral ni el transporte público», la Provincia anunció este lunes que el pase será obligatorio no solo para eventos masivos sino para «los trabajadores que realicen atención al público, en entidades públicas o privadas».
La obligatoriedad del pase en territorio bonaerense comenzará el 21 de diciembre, pero antes habrá una resolución publicada en el Boletín Oficial.
Con esta medida buscan achicar la brecha entre vacunados de primera y segunda dosis, que están disponibles desde hace meses. De hecho, a partir de este viernes habrá segunda dosis libres para mayores de 3 años. Hasta este lunes, en la provincia de Buenos Aires, aún había 2.506.000 de personas que estaban vacunadas con la primera dosis y no habían recibido la segunda y achicar esa diferencia es el principal objetivo de la medida. «En la población de 18 a 49 años que es una de las poblaciones que más preocupa alrededor del mundo porque es la población que tiene más actividad, tenemos el 89,4% de la población con primera dosis, pero tenemos el 74,6 con segunda dosis y ya hace muchas semanas que esta segunda dosis es libre. Es una población que se ha vacunado en un 90%, pero un 75% ha completado esquemas», explicó Kreplak al respecto.
