El ministro de Seguridad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Marcelo D’Alessandro, cuestionó este domingo la movilización por parte de militantes de La Cámpora al departamento que la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner tiene en el barrio de la Recoleta y aseguró que “hubo un incumpliendo del acuerdo” alcanzado el día anterior con el Gobierno nacional.

“Es el incumplimiento de lo acordado con ellos ayer (por el sábado), una vez más. Es una nueva muestra de provocación”, precisó el funcionario responsable de la seguridad porteña durante una entrevista que mantuvo en el canal TN.

En esta línea, D’Alessandro sostuvo que “lo que empezó como un aliento de la militancia a su líder, terminó después en parrilladas, batucadas y fuegos artificiales” e indicó que los seguidores de Cristina Fernández de Kirchner “pretendían hacer una feria y un acampe” en el barrio.

Luego de los incidentes que se produjeron en el lugar entre la Policía y los manifestantes en la víspera, cuyo disparador había sido la colocación de vallas perimetrales por parte del GCBA, autoridades porteñas y nacionales se reunieron y acordaron que las mismas se quitarían las vallas en la cuadra donde vive Cristina Kirchner, si los militantes no volvían a cortar la calle.

“No es que no hay policías, nosotros tenemos los carros de infantería sobre la calle Uruguay, estamos a 100 metros de ahí. El punto es que ellos quieren la provocación constante para generar la violencia. Hoy estuvimos muy bien hasta las 6 de la tarde, cuando desviamos unos seis micros que venían de Ituzaingó y una caravana de La Matanza. Tres colectivos lograron pasar y son los que trajeron a esta gente”, comentó D’Alessandro.

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En este sentido, el responsable de la cartera de seguridad municipal les advirtió a los militantes que “si no liberan la calle, por supuesto que va a trabajar la infantería y mañana se hará lo mismo”, por lo que pidió por “la responsabilidad de los dirigentes” del oficialismo, al advertir que el gobierno porteño no va “a entregar la calle”.

“Yo intenté bajo todo punto de vista hablar con ellos, como lo hice siempre. Por eso digo que es una provocación. Hablé con todos los dirigentes con los que podía hablar, con (el viceministro de Justicia de la Nación) Martín Mena, con (la presidenta de la Cámara de Diputados) Cecilia Moreau, con (el dirigente social) Juan Grabois, absolutamente con todos. No queremos ejercer violencia, pero tampoco la vamos a tolerar”, añadió.

En esta línea, el funcionario porteño consideró que “las imágenes muestran bien claro cómo ellos se manejan constantemente con violencia y esta pseudo militancia que dicen tener, no es nada más que una planificación sistemática para irse rotando, en la que tienen que cumplir roles algunos intendentes del conurbano y algunos referentes del sindicalismo”.

En tanto, defendió la decisión de colocar las controversiales vallas en las inmediaciones del departamento de Cristina Kirchner y explicó: “Este es el límite. No van a hacer una feria. Terminemos con esta situación. ¿Cómo generamos la convivencia? Ellos, cuando empezaron con los actos divididos, se sabía que a partir de ahí querían concentrar también en Uruguay y Juncal, y eso no lo podíamos permitir. Por eso se tomó la decisión de contener la situación”.

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