Tras dos jornadas con mucho calor y humedad, los expertos permanecen a la expectativa de lo que podría ser una nueva tormenta de Santa Rosa. El fenómeno climático, que ocurre siempre en la misma época del año, encendió alarmas por la intensidad con que suele darse y podría volver a darse esta misma tarde en La Plata y el resto de la región.

Los especialistas tanto del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) como en la Dirección de Hidrometeorología de la Municipalidad se mantienen expectantes a la evolución del tiempo emitieron avisos por la llegada de fuertes tormentas. Aunque la mañana comenzó con buen clima y algo de niebla, los meteorólogos esperan que las condiciones desmejoren rápidamente pasado el mediodía y anticipan los primeros chaparrones en el comienzo mismo de la tarde.

Lo peor, sin embargo, llegaría algunas horas después y es que los expertos anticipan altas probabilidades de lluvias y tormentas de gran intensidad sobre el cierre de la jornada y el comienzo del primero de los días del fin de semana. Así, para la madrugada y mañana del sábado se prevén todavía más lluvias e incluso fuertes ráfagas de viento que podrían alcanzar velocidades de entre 51 y 59 km/h.

El pronóstico, coincidente con las fechas en las que la tormenta de Santa Rosa tiene lugar, fue lo que puso en alerta a las autoridades y por ello la Comuna informó que ya se elevó a «Amarillo» el Nivel de Atención del Riesgo (NAR). «En La Plata, amanece frío 11°C, húmedo con neblinas matinales. Desmejorando en la tarde noche con chaparrones y tormentas de variada intensidad, continuarán en la madrugada del sábado. Ventoso del sudoeste con ráfagas», indicaron a través de las redes sociales.

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El SMN también emitió un aviso en el mismo sentido e indicó que habrá una «alerta por tormentas» en la ciudad y en gran parte de la provincia de Buenos Aires a lo largo de toda la jornada.

«El área será afectada por tormentas, algunas localmente fuertes. Las mismas estarán acompañadas por fuerte actividad eléctrica, intensas ráfagas, caída de granizo y abundante caída de agua en cortos periodos», advirtieron los expertos argentinos y cerraron que las precipitaciones podrían promediar entre 20 y 40 mm de agua, aunque esos valores podrían ser superados en algunos distritos.

SANTA ROSA: ¿MITO O REALIDAD?

La famosa tormenta de finales de agosto es uno de los eventos más esperados y populares del año. Pero, ¿realmente puede considerarse como un fenómeno recurrente? ¿o es simplemente un mito?

Cada 30 de agosto se celebra el día de Santa Rosa de Lima, y, según la creencia popular, alrededor de esta fecha hay que esperar una tormenta intensa. Pero ese “alrededor” no está fijo, y según la conveniencia del creyente, puede ser una tormenta que ocurre unos 3 o 4 días en torno al 30 de agosto o unos 15 días antes y después de esa fecha.

Lo cierto, es que como este límite no está del todo claro, cualquier tormenta entre agosto y septiembre podría ser “la de Santa Rosa”. Pero para los meteorólogos hay algunos parámetros para analizar la frecuencia del popular fenómeno.

Según el glosario meteorológico de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), para que haya tormenta tiene que haber actividad eléctrica. Una lluvia sin la presencia de descargas bruscas de electricidad atmosférica acompañadas por un resplandor (relámpago) y un ruido (trueno), no clasifica como tormenta.

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Las tormentas se asocian a nubes denominadas convectivas (cumulonimbus) las que, generalmente, generan precipitaciones intensas en forma de chaparrón de lluvia o, en ocasiones, de nieve o granizo, así como también vientos fuertes.

REGIÓN, CONDICIONES Y ÉPOCA

En regiones como la Patagonia no es común tener la formación de tormentas, así que la frecuencia de Santa Rosa es muy baja. Algo similar ocurre en Noroeste Argentino (NOA), donde la época está marcada por la estación seca y predominan los días despejados y con mucho sol.

Donde sí es frecuente la generación de tormentas en esta época es en el centro y noreste argentino; como por ejemplo La Plata.

Desde mediados y finales de agosto, la atmósfera es sometida a cambios en su circulación debido a la proximidad de la primavera, lo que favorece la presencia de aire cálido, más humedad y condiciones propicias para su desarrollo.

Eso sí, aunque popularmente se espera que la tormenta de Santa Rosa sea más fuerte que cualquier otra, no hay evidencia de que esto sea siempre así.

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