Referente en Talleres por lo que sembró, y ahora en su nueva función de entrenador, Pablo Guiñazú rompió el silencio tras su precipitada salida de Atlético Tucumán y se refirió a como sigue su carrera.
También al presente Albiazul en Copa Libertadores, a Andrés Fassi y a Pedro Caixinha, y también a dos ex compañeros por los siente alta estima: Javier Gandolfi y Mauricio Caranta. E incluso, habló de Guillermo Farré.
“Siempre estoy en contacto con Andrés (Fassi). Amo Talleres con todo el alma, volví para retirarme ahí. Si tengo que hablar con Andrés siempre se hará. Uno está al pie del cañón para lo que sea y más para este club, poque soy un agradecido. Tiempo al tiempo”.
“Me gusta el perfil de Caixinha, su personalidad. Espero que se siga acostumbrando al fútbol argentino y haga más historia en Talleres”
En la próxima fase de la Libertadores que venga el que venga. No hay que elegir porque es un mata-mata. Y Talleres demostró estar a la altura de los clubes más importantes del fútbol sudamericano”.
“Me da mucha alegría que Javier (Gandolfi) esté haciendo sus pasos como entrenador de esta forma. Le digo que aprenda porque del otro lado de la línea es diferente. Javi es un baluarte que cualquiera quiere a su lado”.
“Al Mauri (Caranta) le pedí que no se vayan ni un metro del fútbol y de esta decisión de ser técnico, porque va a enseñar mucho. Lo fui a ver a los entrenamientos de Instituto, ví la alegría de los jugadores y dirigentes. Pero no tuvo resultados y dio un paso al costado, eso es lo ingrato del fútbol”.
“No puedo decir nada de Guido (Herrera), es el capitán de Talleres, mantuvo un buen nivel durante mucho tiempo en un mismo club y sacó la chapa en un partido decisivo en Perú”.
“Me encanta Rodrigo Villagra, es un jugador que no tiene techo. El corazón del equipo. El Ajito (Juárez) tuvo un paso muy bueno en Agropecuario. Conoce al club, tiene que ir con tranquilidad”.
“Guille (Farré) es un emblemático de Belgrano que ahora está en otra etapa. Vio una oportunidad gigante y la tomó, sin importar que ponía en riesgo su capital como ídolo. La verdad, me saco el sombrero con lo hecho por él”.
“Me siento muy feliz de haber encarado el desafío en Atlético Tucumán. Se abrió una oportunidad y no dudé. Nos tocaron seis partidos en los que no tuvimos resultados, pero nos llevamos cosas positivas. Fui aprendiendo, fui a llenarme de experiencias… me apasionó. Tuvimos un gesto de lealtad en dar un paso al costado para que venga alguien que pueda revertir la situación”.