En el marco de un nuevo aniversario del estallido social de diciembre de 2001 y en contra de las medidas económicas adoptadas por el presidente, Javier Milei, Organizaciones Sociales llevarán a cabo este miércoles una importante movilización hacia Plaza de Mayo, con el aviso de que las fuerzas de seguridad implementarán por primera vez el nuevo protocolo para evitar el corte en la circulación.
La movilización desde el Congreso a Plaza de Mayo se realizará a partir de las 16, aunque se espera que los manifestantes intenten ingresar a la Ciudad de Buenos Aires desde el mediodía.
La protesta se enmarca en un clima de tensión, ya que el Gobierno anticipó que habrá efectivos de las fuerzas de seguridad dispuestos para liberar las calles en caso de ser cortadas.
Así lo anunció Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de la Nación, que remarcó que no permitirá que se corten las calles ni tampoco que los manifestantes generen violencia o lleven elementos contundentes.
Además, anunció que se buscará «identificar a los titulares de planes sociales para quitarles el beneficio si participan del piquete».
«Hay compañeros en los comedores populares que comen una vez al día. Hace un mes y medio que no reciben comida», argumentó el líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, uno de los referentes que tendrá la marcha.
Las organizaciones sociales confirmaron que se movilizarán a pesar de la implementación del protocolo antipiquetes dispuesto por la ministra de Seguridad y las advertencias de la titular de la cartera de Capital Humano, Sandra Pettovello, quien anunció que le quitará los planes sociales a las personas que asistan a las marchas y corten las calles.
En cuanto a la Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, el ministro Waldo Wolff se alineó al protocolo dispuesto por Nación y desplegará un gran operativo de efectivos para evitar el corte en la circulación.
“Hay dos derechos, derecho a movilizarse y a circular. Que levanten la bandera del equilibrio, si actúan así, estamos para actuar de ese modo. Queremos ser una sociedad y una Ciudad normal. Vamos a trabajar sin pausa para lograrlo. Los dos derechos en armonía y en paz», expresó Wolff.
El secretario de Seguridad a cargo de la Policía de la Ciudad, Diego Kravetz, informó que habrá alrededor de 2.000 efectivos desplegados en el operativo.
«Nosotros vamos a garantizar la libre circulación de los ciudadanos», afirmó el funcionario.
Desde la provincia de Buenos Aires, el Gobierno que encabeza Axel Kicillof se expresó en contra del protocolo de seguridad antipiquete porque argumentaron que de ese modo se «criminaliza la protesta».
“Sé que hay contactos entre nuestro ministro de Seguridad y el de la Nación, como corresponde, son contactos institucionales y operativos. No nos han solicitado que apliquemos el protocolo y no vamos a aplicar ese protocolo porque no estamos de acuerdo con las disposiciones», dijo el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco.