La noche de este miércoles 12 febrero, más de un centenar de empresarios mexicanos se reunieron con el presidente Andrés Manuel López Obrador en uno de los salones de Palacio Nacional, en la Ciudad de México, para resolver los problemas de desabasto de medicamentos y equipo médico en el sistema de salud.

Al lugar arribaron Carlos Slim, de Grupo Carso; Emilio Azcárraga, de Televisa; Olegario Vázquez (Grupo Ángeles); María Asunción Aramburuzabala, de Antad; Carlos Bremer, de Grupo Financiero Value; Daniel Servitje, de Grupo Bimbo; Humberto Garza, de Femsa; Daniel Chávez, de Grupo Vidanta; Carlos Peralta, director de IUSA, por mencionar algunos.

Dentro del recinto, el mandatario y parte de su gabinete, en compañía de niños “gritones” de la Lotería Nacional (que anuncian a los ganadores de cada sorteo), los recibió con una cena tradicional tabasqueña: tamales de chipilín y atole de chocolate.

Además de platos, tazas y cubiertos, en cada lugar de los invitados de la iniciativa privada, se colocó una carta compromiso para apoyar “de manera voluntaria” al presidente en su propuesta de rifa relacionada con el Boeing 787-8, mejor conocido como el “avión presidencial”; la cual se filtró en redes sociales mientras se realizaba la cena.

“Por medio de la presente manifiesto mi compromiso para participar de manera voluntaria en la compra de billetes de la Lotería Nacional con motivo del sorteo conmemorativo que la misma llevará a cabo en relación con el Avión Presidencial, en beneficio de la asistencia pública, hospitales y adquisición de equipo médico”, señala el documento.

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Debajo hay cuatro opciones con el monto a comprar: 20, 50, 100 y 200 millones de pesos, correspondiente a una cantidad determinada de billetes.

También establece el número, nombre y el banco al que se tiene que hacer el pago, así como un espacio donde los empresarios deben indicar un domicilio al que les llegarán los “cachitos” que hayan decidido comprar.

Asimismo, el documento notifica que Presidencia de la República se encargará de resguardar los datos personales plasmados, que serán usados solamente con fines informativos. De igual manera, se señala que los billetes se entregarán en un plazo de 15 días hábiles después de que se cubra el monto correspondiente.

A su salida de Palacio Nacional, Francisco Cervantes, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) declaró: “Algo que tenemos que destacar es que fue voluntario; él dijo ‘aquí no hay presiones’”.

Por su parte, Humberto Garza, de Famsa, aclaró que “no es ningún compromiso, no es ningún pagaré, era una sugerencia”.

Mientras que Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), afirmó: “Lo que yo entiendo y estamos apoyando es el tema de salud en este país, desde equipos médico y medicamentos es una distribución para el sistema de salud, que no la está pasando bien ahorita”.

De acuerdo El Financiero, ningún empresario quiso decir con cuántos “cachitos” se comprometió; incluso, varios no firmaron la carta compromiso y se la llevaron. Sin embargo, se alcanzó “casi” la meta, que era de 2 mil millones de pesos.

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Tras filtrarse la carta compromiso que se entregó a los empresarios durante la reunión, varios usuarios, especialistas y líderes de opinión en Twitter compararon el hecho con el “pase de charola” de Carlos Salinas de Gortari en 1993 cuando en una reunión pidió dinero a empresarios para quien sería el candidato de su partido a la presidencia de la República: Luis Donaldo Colosio.

“Esta noche el presidente le pasará la charola a 100 empresarios, exactamente como lo hizo Carlos Salinas en 1994, intercambiando favores”, escribió la politóloga Denise Dresser.

“Y pensar que AMLO criticó el pase de Charola de Salinas”, tuiteó el periodista Héctor de Mauleón.

“Nada dice ‘Vengan a invertir, empresarios del mundo’ como un pase de charola. Con plumas Bic en la mesa y tamales en el plato”, el periodista Julio Patán.

“Ha de ser muy generador de confianza que te extorsionen desde Palacio Nacional. Qué tristeza da regresar a las peores prácticas del pasado”, escribió la economista Valeria Moy.

“Cómo puede decir ‘carta compromiso’ y ‘voluntariamente’ el mismo documento? Y las cantidades! Eso es extorsión!”, tuiteó Mayra Portillo

Por su parte Jenaro Villamil, presidente del Sistema Público de Radiodifusión, respondió las críticas recordando que el ”pase de charola” fue para recaudar fondos para la campaña del PRI y no para solicitarles ayuda a empresarios para la venta de boletos.

Cabe mencionar que desde la conferencia matutina del miércoles 12 de febrero, el presidente López Obrador informó que invitó a los empresarios a una cena en Palacio Nacional para solicitarles que adquieran boletos de Lotería Nacional.

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“Los empresarios siempre nos han ayudado, nos apoyan, tienen una dimensión social, están en disposición de ayudar al gobierno, de que todos ayudemos para sacar adelante a nuestro país”, comentó el mandatario, durante la conferencia de prensa matutina.

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