El grupo agroindustrial Ledesma justificó el cierre de la fábrica de papel encapado radicada en la provincia de San Luis, el pasado 31 de octubre, ante la fuerte caída en la demanda, tanto global como doméstica de ese producto, y además por la decisión de comenzar a producir un papel “más natural y ecológico”.
La firma despidió a los 70 trabajadores de su planta de San Luis, que no serán reubicados, por lo que decidió enviar una nota a la Bolsa de Comercio para justificar su decisión. El “exceso de oferta” del producto “afectó y estimamos seguirá afectando la rentabilidad de este segmento”, agregó la papelera Ledesma. Precisó luego que en el mercado interno, donde la empresa colocaba toda su producción, la caída fue de aproximadamente 37% en los últimos cuatro años.
