Un joven de 19 años murió este martes luego de recibir un disparo de fusil cuando cazaba con tres amigos en un predio rural cercano a la localidad de Buena Esperanza, provincia de San Luis y los investigadores creen que se trató de un accidente, informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió en la madrugada, en el establecimiento rural «El Moro», a unos 35 kilómetros de dicha localidad del sur de la provincia puntana, donde se encontraba la víctima, identificada por la Policía como Camilo Tallione.
Según las fuentes, Tallione y tres amigos cazaban jabalíes con armas de fuego en el lugar cuando al separarse el primero de ellos recibió un disparo de fusil que le provocó la muerte.
Los pesquisas creen que uno de sus amigos disparó contra Tallione con un fusil calibre 30.6 al ver un bulto entre la maleza y confundirlo con un jabalí. De acuerdo a los peritos, la víctima recibió el disparo en el cuello, en el lateral izquierdo, lo que le dañó una arteria y acabó por desangrarlo.
Cuando efectivos de la Comisaría Distrito 19 Buena Esperanza arribaron al lugar alertados de lo ocurrido se encontraron con personal médico de una ambulancia que constató el deceso del joven.
A su vez, el parte policial indicó que fue «uno de los tres jóvenes se había quedado atrás» quien efectúa un disparo con el fusil y escucha que desde la oscuridad Tallione grita: «Me pegaste». El joven herido caminó unos metros en dirección al tirador y se desvaneció, ya sin vida.
En la tarde de este martes fue detenido formalmente un joven de apellido Busso en una causa caratulada provisoriamente como «homicidio culposo», y se trataría de quien efectuó el disparo mortal.
Según las fuentes, Tallione era oriundo de Buena Esperanza e hijo de la sargento de Policía Vanesa Ceballos y del sargento Jorge Tallione.
En la pesquisa intervino personal de la División Homicidios de Villa Mercedes, bajo las directivas del iscal de la Segunda Circunscripción Judicial, Francisco Assat.
