La conmoción y el dolor reinan en las redes sociales a raíz de la trágica muerte de Isabella Marino, una joven estudiante de la Facultad de Veterinaria de la UNLP que se arrojó de un colectivo en movimiento tras darse cuenta, según se presume, que la unidad circulaba en la dirección contraria a la que ella se dirigía.
Aunque todo sucedió alrededor de las 13.30 del último lunes en 60 entre 122 y 123, la triste noticia trascendió en las redes sociales, pero desde hace días familiares y amigos se volcaron a las redes sociales para dar cuenta de todo su dolor y despedir con sentidas palabras a la joven de 18 años que había llegado a La Plata pocos días antes para comenzar el curso de ingreso.
«¡Gracias Isabella! No hay palabras para expresar nuestro dolor por tu partida, ni explicación posible. Atesoramos en nuestros corazones tu sonrisa, tu frescura, las horas de todos los años compartidos», reza parte del mensaje publicado por la Escuela Agrotécnica Nº 733 «Benito Owen», a la que acudía la joven en la localidad de Gaiman, ubicada a 20 kilómetros de la ciudad de Trelew en la provincia de Chubut.
Compañeros, familiares, amigos o simplemente allegados y conocidos a la joven, no dejaron pasar la oportunidad de expresar su dolor y asombro por la repentina partida de Isabella. Mientras concluyen con los peritajes para saber a ciencia cierta qué fue lo que ocurrió y por qué, las publicaciones se multiplican en las redes.
Incluso los responsables del Instituto Provincial de la Vivienda de Chubut, donde trabaja el padre de la víctima, también manifestaron su «hondo pesar el fallecimiento de Isabella» y enviaron «mucha fuerza a toda la familia». Mientras que en la cuenta oficial de la Municipalidad de Gaiman también se refirieron a la trágica muerte de la joven y escribieron un mensaje acompañando a los familiares de la joven en «tan duro momento».
Según los primeros trascendidos, la joven de 18 años había arribado a nuestra ciudad hacía unos días, para emprender sus estudios. Aún son inciertas las razones por las que terminó arrojándose del micro 214, en la zona de 60 y 123.
Las demostraciones de afecto siguen siendo protagonistas en las redes y seguirán despidiendo de manera emotiva a Isabella. Mientras tanto la Justicia avanza en la investigación y con la causa, en la cual hasta el momento está imputado el chofer de la unidad, un hombre de 34 años, bajo la carátula de «lesiones culposas».
