Decenas de empleados y familiares cortaron este jueves el último tramo de la Ruta Nacional 60, donde se emplaza la planta de producción de carbonato de litio de la minera china Ziijin-Liex, como respuesta a una docena de empleados que fueron cesanteados sin causa el miércoles 3 de enero.
Tras el corte, el gremio AOMA intervino y anunció medidas de fuerzas durante la jornada del viernes.
Desde hace varios meses empleadas y empledos de Fiambalá, distrito donde se encuentra el proyecto de litio 3Q de la empresa china, vienen denunciando incumplimientos por parte de la patronal referidos a los convenios colectivos de trabajo, seguridad y salarios, así como una mayor presencia de controles por parte del Gobierno provincial y los gremios. Esta semana el malestar tuvo una escalada más con el despido sin causa de una docena de operarios.
La decisión de la empresa motivó la movilización de los empleados y el enojo de las familias que cortaron la ruta y el ingreso a la planta de producción de carbonato de litio. En el lugaar se presentaron el intendente Raúl Usqueda y el diputado provincial Hugo Ávila, ambos de Juntos por el Cambio.
Los trabajadores exigieron exigen una mesa de diálogo con las autoridades de la minera, que hasta el momento no han accedido. Ante la negativa, el gremio AOMA convocó a una asamblea extraordinaria y a tomar medidas de fuerza y convocó a partir de las 8 de la mañana de este viernes a «medidas de acción directa bajo la modalidad asistencia al lugar de trabajo sin prestación de tareas laborales con el objeto que la patronal reincorpore a los trabajadores despedidos a sus tareas habituales y no vulnere más el derecho de los trabajadores de la actividad».
En tanto la empresa notificó a los empleados que este viernes no asistirán a la planta y que deberán realizar tareas desde sus casas.
