Con su colosal tamaño, de unos 12 metros de longitud, un peso de entre 6 y 9 toneladas, dientes en forma de daga y garras afiladas, Tyrannosaurus rex fue el depredador prehistórico más conocido de la Tierra. Ahora, un equipo de científicos que estudian sus fósiles han sugerido que esta criatura podría no haber sido la única especie de tiranosaurio, sino que podría tratarse de tres especies diferentes.

 

Uno de los dinosaurios más populares

Los investigadores estadounidenses volvieron a analizar casi 40 esqueletos fosilizados de Tyrannosaurus rex encontrados por paleontólogos en el transcurso de más de un siglo. Los especímenes estudiados incluyeron ‘Sue’, un esqueleto completo de Tyrannosaurus que actualmente se encuentra en el Museo Field de Historia Natural en Chicago, y ‘AMNH 5027’, encontrado en Big Dry Creek, Montana, en 1908.

Descubrieron, en los especímenes estudiados, diferencias físicas en el fémur, así como en las estructuras dentales y otros huesos, pistas que sugieren tres especies diferentes de Tyrannosaurus y no una, como se creía hasta ahora. El examen de los fémures fosilizados reveló que algunos eran más delgados mientras que otros eran más robustos, con una proporción de 1:2 respectivamente entre los 24 fémures analizados. Y no era una diferencia atribuible al sexo ni a la mezcla de individuos juveniles y adultos (pues hallaron fémures robustos en algunos especímenes juveniles de dos tercios del tamaño de un adulto y fémures más ligeros en algunos especímenes de tamaño adulto completo), lo que significaba que había algo más en juego para explicar esta variación. También midieron el diámetro de la base de los dientes o el espacio en las encías para evaluar si las muestras tenían uno o dos dientes incisivos delgados. La estructura dental también varió entre los especímenes, aunque hubo un número bastante bajo de especímenes con medidas de fémur y restos dentales disponibles para el estudio (12 especímenes).

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Si ni el sexo ni la edad explicaban esta discrepancia… ¿qué marcaba la diferencia? Tres especies.

 

¡Tres especies!

Hasta ahora las diferencias en la morfología esquelética de los especímenes de Tyrannosaurus se habían atribuido principalmente al dimorfismo sexual, cuando los miembros masculinos y femeninos de la misma especie parecen diferentes. Pero solo una última explicación posible es la más sorprendente: las diferencias representan especies distintas dentro del género Tyrannosaurus.

 

 

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