«Puede decir cada uno lo que opina. Es bastante común. En todos los casos, si uno ve la declaración de todos los que han tenido juicio, más o menos es la misma. Es una defensa razonable desde el punto de vista político. No hay que exagerarlo. Cada uno dice lo que quiere. El problema es que funcione el proceso con objetividad, imparcialidad y no se llegue a ese terreno», remarcó sobre las palabras de Cristina, quien aseguró estar proscripta por el «Partido Judicial».
Cristina Kirchner: «Me odian, me persiguen, me proscriben»
El 25 de mayo pasado, la vicepresidenta volvió a apuntar contra la Corte Suprema en una Plaza de Mayo colmada por militantes.
«Todos saben las diferencias que he tenido y tengo y no es necesario explicarlas… Lo dije un 20 de diciembre en La Plata cuando señalé: ´Va a haber crecimiento, pero ojo cuiden los precios de la economía porque sino se lo van a llevar cuatro vivos ´», dijo en un tramo de su discurso.
Y continuó: «Y pasó, se lo están llevando cuatro vivos. Porque Argentina volvió a crecer, porque a pesar de las equivocaciones o diferencias, este gobierno es infinitamente mejor de lo que hubiera sido otro de Mauricio Macri, no tengo dudas».
En ese sentido, remarcó que el problema «es la distribución del ingreso» y apuntó: «¿O por qué se creen que en mi segundo gobierno pudimos llegar al 51%? o ¿por qué creen que me odian, me persiguen y me proscriben? Por eso: porque nunca fui de ellos ni lo voy a ser. Hagan lo que hagan, aunque me quieran matar, meter presa, nunca voy a ser de ellos. Yo soy del pueblo y de ahí no me muevo».