Gloria Romero, madre de la joven desparecida Cecilia Strzyzowski, reveló este miércoles que su hija y su pareja César Sena tenían un salón reservado y habían invitados a sus allegados para la fiesta de casamiento que iba a celebrarse el 23 de diciembre. Llamativamente, dos días antes se había firmado la sentencia de divorcio.
Según informó el portal Data Chaco, la unión matrimonial iba a ser por iglesia y luego el festejo iba a realizarse el 23 de diciembre de 2022 en el Rancho El Dorado, ubicado en el kilómetro 9 de la Ruta 16, que ya había sido reservado.
Ese festejo fue postergado en principio por cuestiones climáticas y luego por las intensas actividades de Cecilia y el hijo de Emerenciano Sena y Marcela Acuña ya que habían pasado pocos días de la apertura de la cafetería Gato Negro en la calle Hipólito Yrigoyen al 460, pleno centro de la ciudad.
“Nuestra unión se celebrará en el Rancho El Dorado, ruta Nicolás Avellaneda, Resistencia, Chaco, a partir de las 18 horas. Confirmar asistencia”, rezaba la tarjeta
«Esa semana llovió muchísimo y estaban con el tema de la cafetería que se había inaugurado hace poquito. Por eso, supuestamente postergaron», afirmó Gloria. La postergación terminó en una cancelación. Ni los festejos de la unión civil ni el matrimonio por iglesia, que aparentemente también tenían previsto, se realizó.
El nuevo dato vuelve a sembrar dudas sobre el divorcio y la presión ejercida por la familia Sena que veía con malos ojos no sólo la forma en que se conocieron (a través de una aplicación de citas) sino la diferencia de casi diez años edad entre ambos.
La pareja se había casado el 16 de septiembre de 2022 y terminó iniciando los trámites de divorcio el 20 de ese mes. ¿Los motivos? Marcela Acuña habría ejercido presión para cancelar esa unión y desde su propio entorno manifestaron que ofreció $ 400.000 a Cecilia para que acepte separarse legalmente de su hijo.
Hasta que Gloria Romero no supo que a su hija le había pasado algo, tampoco tenía conocimiento de que se encontraba separada. De hecho, en su declaración testimonial había recordado que «César le había hecho firmar varios documentos de los que desconocía su contenido, los cuales fueron preparados por el abogado de Marcela Acuña».
“Yo no creo en ese divorcio, yo haría peritar la firma de mi hija”, apuntó Gloria Romero sobre la desconfianza respecto al divorcio del cual nunca supo que se concretó.
En referencia a los siete detenidos como presuntos autores del femicidio de su hija, Gloria afirmó: «Es macabro todo lo que hicieron. Desde el cerebro que inventó la historia del trabajo y del viaje, al que lo hizo realmente, el que la envolvió en la frazada, al que se deshizo del cuerpo, al que limpió la casa, incluso quien los financiaba”
La mujer reiteró su pedido de prisión perpetua para César Sena, esposo de Cecilia; y los padres de éste, Emerenciano Sena y Marcela Acuña, y aclaró que “con que tengan el desprecio perpetuo de la sociedad” se conforma.
Romero sostuvo que mantiene su fuerza “para que esto no quede impune” y que quiere “justicia para su hija”, de quien espera “recuperar algo” aunque sea “un trozo de su cuerpo”.
