En una nueva medida en el juicio por US$ 1.600 millones por la empresa YPF, la jueza estadounidense Loretta Preska le exigió este martes a la Argentina demostrar que la petrolera y el Estado representan los mismos intereses. De esta forma, la magistrada pretende que se demuestre la figura del “alter ego” entre el Estado argentino e YPF y el Banco Central.
Mientras se cursan estos pedidos y audiencias en el tribunal del Preska, la Argentina apeló el fallo condenatorio en primera instancia y espera la decisión de fondo de la Cámara de Apelaciones. Ese nuevo fallo podría tardar al menos un año.
Por pedido del demandante, el fondo de inversión Burford Capital, exigió pruebas al país para determinar, o no, que son lo mismo, que representan los mismos intereses y que tomaron y toman decisiones de manera alineada. Así lo decidió luego de una audiencia en su corte del segundo distrito de Manhattan, donde hace ocho años lleva adelante la causa que se generó luego de la expropiación de YPF en 2012.
Preska ya emitió un falló que condenó a la Argentina a pagar unos US$ 16.000 millones, del que Burford es el principal beneficiario. En la audiencia las partes presentaron argumentos a favor y en contra de obligar al país a presentar información sobre si ciertas entidades administradas por el Estado son “alter ego” del país.
En esa lista estaban YPF, Aerolíneas, BCRA, Arsat, Banco Nación y otras. Preska dijo que la petrolera de bandera -el Estado es dueño del 51% del paquete accionario- y el Banco Central podrían encuadrarse bajo esa figura y ordenó que la Argentina presente información de los últimos 2 años para probar su relación con el Estado.
El objetivo detrás del pedido de Burford es embargar activos locales ante la idea de que el Estado no pagará la sentencia que tiene a favor. Ahora, la jueza dejó de lado a las demás empresas y organismos, pero indagará sobre YPF y el Central. Y, eventualmente, podría autorizar embargos sobre los bienes de ambos: acciones en Wall Street, inversiones en el exterior, bonos y otros activos.
Habilitación clave para empezar a exportar maíz a China
La Argentina recibió el visto bueno de las dependencias chinas y fueron habilitados para comenzar la exportación de maíz al país asiático a partir de julio.
La noticia la comunicó la secretaría de Bioeconomía, a cargo de Fernando Vilella, tras recibir la notificación del Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales (MARA) de la República Popular China sobre la habilitación de todos los eventos biotecnológicos de maíz Una habilitación clave para comenzar con los embarques.
Desde el gigante asiático confirmaron que los eventos biotecnológicos de maíz MON-87411y DAS-59122-7 ya forman parte del listado de eventos biotecnológicos habilitados en el sistema de solicitud de Certificados de Bioseguridad para importación, lo que se encontraba pendiente hasta hoy.
De esta manera, los exportadores argentinos están en condiciones de concretar operaciones, habida cuenta que los importadores chinos pueden obtener los certificados de bioseguridad para todos los eventos biotecnológicos de maíz utilizados en la producción argentina.
Cabe destacar que las gestiones de la Secretaría de Bioeconomía, a través de su Consejería Agrícola en la Embajada Argentina en Beijing, fueron realizadas en coordinación con el sector exportador argentino, incluyendo presentación de documentación oficial, intercambio de información disponible sobre el estado de los registros y la posibilidad efectiva de concretar operaciones.