De hecho, este martes las dos CTA y la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) dieron a conocer un documento conjunto con una propuesta para el Consejo del Salario: «el objetivo acordado es que en este último periodo del año el mínimo salarial legal tenga un fuerte incremento que permita recuperar en términos reales la pérdida del poder adquisitivo producto del proceso inflacionario impulsado por los grandes formadores de precios», señala un documento de las tres organizaciones.
A continuación dijeron comprometerse a «impulsar una política salarial común e integral que contemple las necesidades y demandas del conjunto de la clase trabajadores se encuentren en relación de dependencia formal, bajo convenios, en cooperativas o en situaciones de informalidad».
Las últimas reuniones del Consejo dieron como resultado un consenso mayoritario de sus miembros por los aumentos en línea con la inflación y, en general, la disidencia de la CTA Autónoma. En la anterior discusión la CTA de los Trabajadores se abstuvo.