La Justicia hizo lugar a un amparo colectivo y le ordenó al Ejecutivo porteño que se les efectúen hisopados (PCR) semanales a residentes y al personal que se desempeña en los hogares

La Justicia porteña ordenó al gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a testear a trabajadores y residentes en los geriátricos privados de la Capital, luego de hacer lugar a un amparo colectivo que busca garantizar el acceso a la salud de los adultos mayores en plena pandemia de coronavirus.

El fallo, que puede ser apelado hasta el lunes por la administración de Horacio Rodríguez Larreta, dispone que una vez por semana se realice a empleados y personas que viven en las residencias el test PCR (hisopado), ya que hasta ahora se aplica el serológico, que no es efectivo para diagnósticos.

El abogado Andrés Szewc, representante del amparo colectivo, expresó que espera que, más allá de la eventual apelación, el titular del Juzgado en lo Contencioso Administrativo y Tributario 10, Aurelio Ammirato, «ordene que la medida sea de cumplimiento efectivo».

«Si se agotaran las instancias de apelación, transcurriría mucho tiempo y moriría mucha gente. Hasta puede ser que haya terminado la pandemia, porque puede tardar meses hasta la resolución final», apuntó Szewc.

La resolución obliga a la Ciudad a emprender «una campaña de testeo preventivo dirigida al conjunto de las personas hospedadas en todos los establecimientos geriátricos privados de la ciudad y a todos los trabajadores que allí se desempeñan».

Estos testeos deberán llevarse a cabo «con frecuencia semanal y mediante reactivo PCR, mientras persista la circulación comunitaria del virus y el riesgo de contagio», establece el fallo al que tuvo acceso este medio.

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Szewc advirtió que hace varias semanas «el gobierno porteño empezó a testear en forma semanal, tal como pedimos, pero con reactivos serológicos» y explicó: «Estos son más baratos y requieren menos logística, pero no sirven para diagnóstico, sino para cuestiones epidemiológicas».

«Pareciera poco razonable utilizarlos cuando es una carrera contra el tiempo. Detectar cuatro o cinco días tarde la presencia del virus es muerte segura para muchos adultos mayores, siendo que son grupo de riesgo», insistió. De hecho, el letrado explicó: «El cuerpo médico forense de la justicia de la Ciudad dijo que el testeo PCR es el correcto».

Sobre los alcances de la medida, señaló: «Hay casi 600 geriátricos en la Ciudad y 22.500 camas habilitadas». Y estimó: «Los trabajadores médicos y no médicos son unos 15 mil. Esto implica entre 35 y 40 mil testeos semanales con PCR mientras dure la pandemia».

«Desde el gobierno porteño sostienen que hay un problema de implementación y de costos. Personalmente, tengo mis dudas de si está la cantidad de testeos que tendrían que hacer, porque serían unos 140 mil al mes sólo para geriátricos de la Ciudad», alertó el abogado.

Descontando la apelación del gobierno porteño, Szewc señaló que existe una cautelar que aún debe ser aceptada o rechazada para que se aplique la medida mientras dura el proceso, mientras expresó: «Dada la particularidad del caso, que hay muchas vidas en juego, no descarto que el juzgado decida que sea de cumplimiento efectivo».

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