Bajo el lema «Ver lo invisible: el valor del agua», se celebra del 23 de agosto al 1 de septiembre.
La Municipalidad adhiere a la Semana Mundial del Agua como parte de las acciones que se realizan para concientizar sobre la importancia de cuidar este recurso tan valioso.
“Es una buena oportunidad para replantearnos el uso racional, responsable y adecuado del agua, los servicios únicos y esenciales que brinda este vital recurso, y de esta manera garantizar la provisión para toda la comunidad#, señaló el secretario de Obras y Servicios Sanitarios, Jorge Marino.
En primer lugar, se recomienda revisar el estado de las conexiones domiciliarias para que no haya pérdidas ya que, una canilla mal cerrada puede perder hasta 46 litros de agua por día y un inodoro con deficiencias en el flotante, desperdicia 1.200 litros en el mismo período.
También se debe evitar el lavado de autos con mangueras, el riego de parques y jardines. Para el lavado de frentes de propiedades con hidrolavadoras será en un horario determinado y con previa autorización municipal, según el Decreto N° 934/04.
De esta manera, desde nuestros hogares, es necesario realizar oportunamente un mantenimiento en sanitarios y cañerías para un buen funcionamiento impidiendo fugas, cerrar bien las canillas cuando no se utilizan el agua y evitar derroches en todo tiempo a fin de contribuir con un consumo responsable valorando el vital elemento.
Por otra parte, al realizar un consumo responsable de este recurso, contribuimos al ahorro de energía, teniendo en cuenta que para que el agua llegue a la canilla es necesaria la energía eléctrica para su captura, tratamiento, transporte y presurización.
En cuanto al uso para llenado de piletas domiciliarias, está prohibido por Ordenanza ya que demanda miles de litros.
Debido al crecimiento de la población y el impacto del cambio climático, la provisión del agua potable está muy amenazada, por lo tanto, es fundamental el sentido de lo que significa el agua para las personas, su valor sustancial y complejo para nuestros hogares, producción, cultura, salud, educación, economía, la integridad del entorno natural y cómo se cuida este recurso vital.
Cabe mencionar que existe la Ordenanza Municipal N° 2167 que regula el consumo responsable del agua.
