La disposición de la fiscal alcanza tanto al chofer que dejó el camión mal estacionado -quien se negó a declarar- como al joven que conducía el vehículo en el que viajaban las tres víctimas fatales
La fiscal que investiga el trágico siniestro vial en el que murieron tres chicas en la localidad de Ezpeleta, imputó por el delito de homicidio culposo agravado por conducción imprudente tanto al camionero que dejó mal estacionado su vehículo, como al conductor del auto.
En tanto, el joven que manejaba el Peugeot 207, Yamil Bejarano -internado en el hospital Iriarte de Quilmes- mostró cierta mejoría pero su cuadro sigue siendo «crítico». Mientras, ayer se desarrolló el sepelio de las tres víctimas fatales, Carolina Ayelén Claros y las hermanas Estefanía y Camila Capcha, en medio de escenas de dolor de sus familiares y amigos.
Desde la Unidad Funcional de Instrucción Nº 9 de Quilmes, a cargo de la fiscal Claudia Vara, se indicó que tanto el camionero Damián Esteban Bubbalo, chofer de TCEC Servicios, como Yamil Bejarano, quedaron acusados en la causa.
«El chofer del camión, quien está detenido desde el momento del hecho, se negó a declarar y sus abogados ya pidieron la eximición de prisión. Y Bejarano, el único sobreviviente de los ocupantes del auto, está internado y se aguarda por su recuperación».
La fiscal Vara no descarta ninguna posibilidad, ya que el camión estaba estacionado sobre la avenida Centenario entre 401 Bis y Brasil, ocupando toda la calzada. Entonces, Yamil Bejarano no tuvo otra opción más que realizar una maniobra prohibida para intentar esquivarlo y desviarse hacia la mano contraria.
De todos modos, también se analizan los videos que circularon en redes sociales en los que se muestra al joven bebiendo alcohol en las horas previas, aunque todavía no se recibieron los resultados de los análisis de sangre que se le practicaron.
El director del Hospital Iriarte, Juan Manuel Fragomeno, manifestó que la salud del paciente mostró «mejoría» y que el joven «está estable, más allá del cuadro crítico». «Fue trasladado de la Unidad de Atención a Pacientes Críticos a la sala de terapia, y pudimos retirar las drogas vasoactivas porque su presión sanguínea está estable», dijo el médico. Y agregó: «Estamos contentos con la evolución del paciente en las últimas horas».
Yamil Bejarano ingresó en el hospital a las 6.15 del pasado jueves, estaba inconsciente y presentaba traumatismo de cráneo y otras lesiones que ponían en riesgo su vida; por la tarde fue operado en el abdomen y los médicos consiguieron dar respuestas a las lesiones en el hígado y el bazo.
Las tres primas que murieron en el choque fueron veladas ayer en una sala de Ezpeleta y luego fueron inhumadas en el cementerio de Quilmes. A la ceremonia del último adiós a las víctimas, asistieron decenas de personas, entre familiares y vecinos. «No podemos creer lo que pasó», dijeron amigos de Carolina Claros, quien era novia de Yamil Bejarano.
Por su parte, Fabián Abalo, tío del joven, sostuvo: «Volvían de un baile. Por el momento, lo que sabemos es lo que muestran las cámaras: mi sobrino venía bien por su mano y de repente se cruzan tres autos que lo venían encandilando de frente y se come al camión que estaba mal parado».
El siniestro vial ocurrió el último jueves, cerca de las 5.30, cuando el Peugeot 307, conducido por Yamil Bejarano, de 23 años, embistió la parte trasera del camión Mercedes Benz, que estaba mal estacionado. Carolina Ayelén Claros, de 22 años, y las hermanas Estefanía y Camila Capcha, de 18 y 16 años, respectivamente, fallecieron en el acto.
