- Redacción
- BBC News Mundo
Se dijo reiteradamente durante la campaña: si ganaba el balotaje del domingo, Gabriel Boric se convertiría en el presidente electo más joven que haya Chile en su historia.
Cuando el izquierdista inicie su mandato el 11 marzo de 2022, lo hará con 36 años cumplidos el 11 de febrero, y será un mes menor en edad que Manuel Blanco Encalada cuando asumió en 1826 como el primer presidente chileno y el más joven hasta ahora.
Representa el ascenso al poder de una generación que irrumpió en la política en 2011 con las manifestaciones estudiantiles exigiendo educación gratuita y de calidad.
Pero hay otros hitos importantes que dejó su contundente victoria sobre el candidato de derecha José Antonio Kast.
1. El presidente más votado
- Boric se convirtió en el presidente con mayor número de votos recibidos en la historia de Chile: más de 4,6 millones cuando se habían escrutado prácticamente todas las mesas (99,86%).
El candidato de la alianza de izquierda Apruebo Dignidad superó así el caudal de 4 millones de votos que había logrado el expresidente Eduardo Frei en 1993 y que lo hacían hasta ahora el más votado de su país.
No obstante, Frei cosechó aquella vez un mayor porcentaje del total de votos que Boric: 57,9% frente a 55,9%, respectivamente.
Pero hay otra diferencia importante: mientras Frei obtuvo ese apoyo cuando el sufragio en Chile era obligatorio, Boric lo hizo con voto voluntario.
Además, el balotaje del domingo tuvo la mayor participación electoral registrada en Chile con voto voluntario, con 55,5% del padrón electoral, 8,3 millones de votos.
Todo esto «sin lugar a dudas que da mayor legitimidad» al mandato presidencial de Boric, dice Guillermo Holzmann, analista político chileno y profesor de la Universidad de Valparaíso, a BBC Mundo.
2. Una remontada inédita
Boric consiguió además algo que ningún otro candidato en Chile había logrado desde el retorno de la democracia en 1990: ganar un balotaje después de haber salido segundo en la primera vuelta.
De hecho, en la votación de noviembre Kast había superado a Boric por más de dos puntos porcentuales.
Los expertos señalan que para esta remontada inédita en Chile fue clave el aumento de la participación, ya que en noviembre la mayoría de los votantes se quedó en sus casas y sólo sufragó el 47,3%.
Pero también debe recordarse que en la primera vuelta ningún candidato superó el 30% de los votos, algo sin precedentes, advierte Holzmann.
Boric revirtió el resultado «porque una buena cantidad de gente salió a votar tomando la decisión en el último momento», explica el analista.
3. El fin de una era de partidos
La elección que concluyó el domingo marcó además el fin del predominio político que ejercían en Chile los dos grandes bloques de centro-izquierda y centro-derecha desde el retorno de la democracia en 1990.
Boric es el primer presidente electo en esta era chilena ajeno a esos bloques: Apruebo Dignidad fue una alianza entre el Frente Amplio, una coalición de izquierda fundada en 2017, y el Partido Comunista.
Además de oponerse a la derecha de Piñera y de Kast, Boric ha sido crítico de la Concertación de centroizquierda que gobernó Chile entre 1990 y 2010, compuesta por el Partido Socialista y la Democracia Cristiana.
Y su mensaje de cambio logró sintonizar con un amplio sector de la sociedad chilena desencantado con los partidos tradicionales, sobre todo desde el estallido social de 2019.
«Hoy pasaron a retiro los partidos del viejo establishment, y comienza la conformación del nuevo conjunto de partidos que recupera la confianza en la política, con más de 8 millones de votantes», tuiteó la analista política y encuestadora chilena Marta Lagos en la madrugada de este lunes.
Holzmann asegura que Boric logró captar «un voto pragmático que quiere un cambio y transformación».
«Eso es una crítica a la estructura de poder que hay en Chile», explica, «pero no significa que todo ese voto sea de izquierda».
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