Con la planta de empleados que conserva, agregó, trabaja en el diseño de una marca propia para vender de manera directa al público. «Estamos preparando todo porque al no tener intermediarios, voy a tener precios competitivos pero todo dependerá de la evolución de la economía del país», cerró.
Futuro complicado
Topper Tucumán enfrenta un futuro incierto. Entre marzo y abril despidió a 120 trabajadores y frente a la falta de ventas, esta semana la fábrica licenció a sus 1.190 empleados (938 operarios), porque sus depósitos están con exceso de stock. Hace un mes, los empleados de mayor antigüedad fueron obligados a tomarse los días de vacaciones que tenían pendientes pero como fue insuficiente para generar ahorro, la empresa adoptó esta última medida. El retorno para todos será el próximo lunes 22.
En diálogo con Ámbito, Jorge Fugaracho representante provincial de la Unión Trabajadores de la Industria del Calzado de la República Argentina (UTICRA), reconoció que hay preocupación porque es un escenario similar al que se vivió durante la gestión del expresidente Macri, cuando la exAlpargatas despidió a 500 empleados. «Ojalá que esta vez no pasé, sería el peor escenario para una ciudad, como Aguilares, que tiene en los rubros textil y del calzado unas importantes fuentes de trabajo», sostuvo. «Las últimas medidas del Gobierno no parecen que vayan a ayudar a que se recupere la producción nacional», expresó el dirigente.
«Como en la pandemia»
La Rioja cuenta con un parque industrial en donde se encuentran, sobre todo, plantas de los rubros textil y del calzado. Desde enero de este año la reducción del personal es una constante y lo más grave se produjo en mayo, con el cierre de la firma TextilCom, en esta provincia y en Catamarca.
Contaba con una dotación de 140 empleados en el parque riojano y 124 en un edificio en la capital catamarqueña. Los trabajadores todavía no percibieron indemnizaciones, se les adeudan salarios y su reinserción en el mercado laboral es incierta.
Juan Serrano, vicepresidente de Unión de Industrias Riojanas (UNIR), sostuvo que el Parque industrial trabaja con valores bajos, en relación a su capacidad instalada.
«Estamos en una instancia de supervivencia, como en los niveles productivos de la pandemia, a un 30% o 40%, debido a la caída de la actividad económica». Consultado sobre este último mes, lo describió como un escenario de estancamiento.
«No empeoró pero tampoco mejoró, se mantiene la tendencia negativa en el tiempo y se produce lo mínimo, ya que es más caro mantener la planta parada», dijo. Agregó que las empresas más afectadas son las que proveen al mercado interno del país.