Médicos de una clínica privada de la ciudad de Alta Gracia, en Córdoba, evaluaban la posibilidad de amputarle los dos brazos a una mujer que resultó gravemente herida al ser atacada por un perro de raza pitbull.
El hecho ocurrió durante el fin de semana cuando la mujer de 66 años fue atacada en su casa por el perro de su propiedad.
Tras varias horas sin comunicar lo ocurrido fue derivada al Hospital de Alta Gracia, para ser derivada luego a la Clínica Chutro, donde los médicos en primer lugar decidieron amputarle la mano derecha.
En el lugar en el que fue atacada, la mujer mantenía medio centenar de animales, entre los que se encontraban quince perros de distintas razas y la misma cantidad de gatos, algunos de ellos cruza, en estado precario, a los cuales se dedicaba a rescatar de la vía pública.
Al parecer, el incidente ocurrió cuando la mujer intentó separar al pitbull con otro perro con el que se peleaba. El médico Enrique Fernández, en diálogo con Mitre Córdoba, sostuvo que «el estado de salud es sorprendentemente bueno para el nivel de traumatismo que tiene. La mujer está bien, pero tiene una enorme lesión en el brazo derecho desde el codo hacia abajo con pérdida de la mano, del musculo y el hueso expuesto».
El profesional sostuvo que la paciente «probablemente reciba una amputación doble. Veremos la evaluación vascular. Hasta ahora el brazo derecho prácticamente amputado naturalmente. Y veremos qué pasa con el brazo izquierdo».
«Veremos la evaluación vascular. Hasta ahora el brazo derecho prácticamente quedó amputado naturalmente. Veremos qué pasa con el brazo izquierdo«, indicó en declaraciones a otro medio.
El término pitbull agrupa a una serie de razas como el American Pit Bull Terrier, American Staffordshire Terrier, y Staffordshire Bull Terrier, con características particulares originalmente concebidas en Inglaterra y Estados Unidos desde el siglo XIX para las peleas de perros.
El pitbull en general es de tamaño mediano, estructura sólida, pelo corto y una musculatura bien definida, con una indomable capacidad de soportar el dolor físico y para no claudicar en la lucha.
