Con el objetivo de evitar los posibles efectos de las temperaturas extremas sobre la salud se recomienda evitar la exposición directa al sol, de 10 a 16hs, en especial a los bebés, niños pequeños y adultos mayores.
Asimismo, para el cuidado de la salud en la vía pública se destaca la importancia de utilizar y protector solar factor 30 o más, usar gorra o sombrero, ropa ligera, calzado liviano, lentes de sol con filtro, mantenerse hidratado y consumir agua segura con mayor frecuencia.
Para evitar un golpe de calor en lugares cerrados como casas, espacios de trabajo u otros, se recomienda tomar agua con mayor frecuencia, aun cuando no se sienta sed; evitar bebidas con cafeína o con azúcar en exceso, muy fría o muy caliente; consumir frutas y verduras, evitar las comidas abundantes y evitar la actividad física intensa.
Por otra parte, a los más chicos hay que ofrecerles continuamente líquidos, preferentemente agua o jugos naturales y en el caso de lactantes se aconseja darles el pecho de manera más frecuente, es recomendable que vistan ropa holgada, liviana, de algodón y de colores claros; bañarlos y mojarles el cuerpo con frecuencia .También es importante mantenerlos en lugares bien ventilados o con aire acondicionado.
En los bebés, asegurarse de que la piel no se encuentre muy irritada por el sudor en el cuello, pecho, axilas, pliegues del codo y la zona del pañal.
Asimismo, se recomienda prestar atención a signos de alerta como sed intensa y sequedad en la boca, temperatura mayor a 39º C, sudoración excesiva, sensación de calor sofocante, piel seca, agotamiento, mareos o desmayo, dolores de estómago, falta de apetito, náuseas o vómitos, dolores de cabeza, entre otros.
Ante, la presencia de algunos de estos síntomas, concurrir al centro de salud más cercano.
