Una ambientalista fue encontrada sin vida, con signos de haber sido torturada, en su casa de la ciudad de Calama, en Chile.
Entre sus conclusiones preliminares, el fiscal destacó «la alevosía y ensañamiento con que ambos imputados cometieron este violento delito».
Rojas, quien apareció muerta y atada de pies y manos, acreditaba trayectoria en la defensa del medio ambiente.
La Fiscalía Local de Calama informó este jueves que se formalizó la investigación contra dos individuos, cuya identidad se resguarda a pedido de las autoridades: «J.P.D.B.», imputado por femicidio, y «M.L.S.», con cargos por homicidio calificado.
Ambos están en prisión de forma preventiva, «por ser considerados un peligro para la seguridad de la sociedad».
Citando al fiscal Cristián Aliaga, La Tercera publicó que el primero de ellos, de 29 años, sería el conviviente de la víctima, mientras que el segundo, de 23, sería un ciudadano extranjero con un vínculo menos cercano.
El fiscal también señaló que el inmueble en donde sucedieron los hechos estaba en «ruinas», siendo un escenario que registró muchos allanamientos por temas de drogas.
En su texto oficial, el Ministerio Público expresó que el asesinato se cometió el 27 de noviembre.
Desde el día anterior, los acusados la habrían sometido a todo tipo de torturas: «En el lugar, víctima e imputados tuvieron una discusión por aparentes temas de dinero, luego la amarraron de pies y manos, y posteriormente, la golpearon en reiteradas oportunidades en el cráneo y cuerpo, propinándole diversas puñaladas en sus extremidades inferiores».
Entre sus actuaciones más destacadas sobresale su oposición a la construcción del embalse La Tranca en 2018, dentro de la localidad El Durazno, en el valle Cogotí, Región de Coquimbo.
En aquel tiempo, presidía la Agrupación Ecológica Valle de El Durazno.
Tras darse a conocer el crimen, el Movimiento por el Agua y los Territorios (MAT) comunicó: «El contexto confuso descrito hasta el momento, no nos permite afirmar hasta ahora que se deba a su calidad de defensora, sin embargo, podemos asegurar que se enmarca dentro de la violencia de género que vulnera a mujeres día a día».