La mujer reveló que escondió el cuerpo, porque temía que la echen del departamento de Tokio (Japón) donde residía.
Yumi Yoshino, de 48 años, quedó detenida acusada de haber «ocultado el cuerpo de una mujer», encontrado el pasado miércoles en un congelador de un departamento de Tokio, Japón).
La acusada aseguró que escondió el cuerpo, porque temía ser expulsada del departamento si se descubría que la titular del contrato, que era su propia madre, había fallecido.
La mujer japonesa declaró que escondió el cuerpo hace diez años, porque «no quería mudarse» del departamento en el que vivía con su madre. El alquiler de la vivienda estaba a nombre de la mamá, que se estima que tenía unos 60 años cuando murió.
El hecho se descubrió cuando Yoshino tuvo que dejar el departamento a mediados de enero, por retrasos en el pago del alquiler, y una persona que fue a limpiarlo se encontró con la macabra situación.
La autopsia que se realizó no pudo determinar el momento, ni la causa de la muerte. Según la policía, el cuerpo estaba doblado para poder entrar en el freezer y no había heridas visibles, según informó la prensa japonesa.
El paradero de Yoshino se desconocía hasta el viernes por la mañana, cuando los investigadores la encontraron en un hotel de una ciudad cercana a Tokio.
