Marcelo Villegas, el exministro de Trabajo de María Eugenia Vidal, fue imputado este martes por la Justicia federal en el marco de la denuncia por el presunto armado de causas contra el ex líder de la UOCRA platense Juan Pablo «Pata» Medina. La presentación había sido hecha por la AFI Agencia Federal de Inteligencia (AFI) después que fuera hallada la grabación con video y audio de una reunión realizada el 15 de junio de 2017 en la sede del Banco Provincia donde el ex funcionario aparece como voz cantante de un presunto acuerdo para avanzar con la ofensivas contra los gremios.
Fue en ese marco que Villegas habló de una Gestapo para avanzar contra los sindicatos en general. «Créeme que si yo pudiera tener –y esto te lo voy a desmentir en cualquier parte–, si yo pudiera tener una Gestapo, una fuerza de embestida para terminar con todos los gremios, lo haría» se lo escucha decir frente a empresarios de la construcción y acompañado de Adrián Grassi, ex subsecretario de Justicia de PBA, además del senador por La Plata Juan Pablo Allan y el intendente Julio Garro, también presente.
Este martes, 24 horas después de conocido el video y presentada la denuncia, la fiscal Ana Russo requirió medidas de prueba al juez Ernesto Kreplak para iniciar la investigación por la maniobra del exfuncionario contra los gremios. La fiscal federal pidió abrir la investigación por la denuncia y como primera medida solicitó identificar a todos los que aparecen en el vídeo.
«Los videos muestran esta reunión del 15 de junio de 2017, donde hay mesa judicial de la provincia de Buenos Aires armada por la mafia de Vidal», aseguró la interventora de la AFI, Cristina Caamaño, al referirse al material que encontraron al hacer una limpieza de los discos duros,. Según detalló la funcionaria, de esa reunión participaron Villegas, el ministro de Infraestructura (Roberto Gigante) y el exsubsecretario de Justicia de la provincia (Adrián Grassi), además de un senador Allan) y el jefe comunal platense, junto a cinco empresarios vinculados con la construcción.
En ese encuentro, los funcionarios bonaerenses garantizaban a los empresarios que tenían una estrategia coordinada con el Poder Judicial y avalada por «Nación y provincia». Con la misma buscaba impulsar una investigación en la que se logre el enjuiciamiento de diversas personas vinculadas a la práctica sindical centralizada en la actividad de la construcción.
«Hablan de una Gestapo para terminar con los gremios, eso dice el que era ministro de Trabajo, es como un médico que diga que quiere matar a los pacientes, o un maestro que no quiera enseñar a escribir o a leer, es todo lo que está mal lo que se habla en esa reunión», opinó la interventora Camaño.
En ese sentido, agregó: «La Justicia lo tiene que determinar pero, aparentemente, Vidal tiene responsabilidad en esto, ya que si sus ministros están haciendo semejante reunión es difícil que la gobernadora no lo sepa».
