Descartaron versiones de subas de hasta 18% en los combustibles
Este jueves, antes de la confirmación de la postergación de la entrada en vigencia de la mayor parte del impuesto, circuló un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) sobre las actualizaciones que corresponden por la inflación del cuarto trimestre del 2023 y del primer trimestre del 2024, se deberían realizar a partir del primero de julio.
En ese documento se advirtió que de no mediar una acción del Gobierno para volver a posponer o modificar la forma de actualización prevista del Impuesto a los Combustibles Líquidos, a partir del 1 de julio estos deberían actualizarse un 115%, lo que provocría un impacto en el surtidor de hasta al 18% en la Ciudad de Buenos Aires.
Pero ante la consulta de este medio, desde la Secretaría de Energía descartaron una suba en surtidores de 18% como se preveía según esas estimaciones privadas, y confirmaron que por el impuesto solo subirán 1%. Sólo serán $11 por cada litro, aclararon las fuentes consultadas por Energyr Report. De hecho, previo a conocer esta decisión, los combustibles en Neuquén, por ejemplo, ya habían aumentaron 3,7% desde el lunes pasado.
Combustibles: ¿Cuánto valdrán las naftas y el gasoil a partir del lunes?
Actualmente la nafta súper de YPF en la ciudad de Buenos Aires vale $905, mientras que el gasoil grado 2 cuesta $941. Si se aplica una suba de alrededor de 6% promedio, esas dos variantes de combustibles pasarán a valer $960 y casi $1.000, respectivamente.
En tanto, la nafta Premium de YPF que hoy cuesta $1.117 el litro pasará a valer unos $1.300, y el gasoil grado 3 subirá de $1.196 a $1.270 aproximadamente.
Si se confirma el próximo lunes una suba promedio del 6%, los combustibles habrán aumentado desde enero pasado un 37,4% promedio para la súper y hasta 50% para la Premium, cuando Javier Milei adoptó la liberación de precios para el sector. En ese mismo período, la inflación oficial del INDEC fue de 71,9%.
El Gobierno postergó los aumentos de luz y gas
Por otro lado, fuentes oficiales confirmaron que el Gobierno también decidió no aumentar las tarifas de luz y gas en julio, como se había anticipado.
En principio, esta medida sólo afectará a las tarifas de julio, con el objetivo de fomentar la recuperación del poder adquisitivo.
“Si un consumidor en junio gastó exactamente el mismo consumo que en julio, su factura tendrá el mismo monto a pagar”, explican en fuentes de la Secretaría de Energía. Y, desde ya pagará menos si el consumo disminuye.
En tanto, cabe recordar que la factura de junio contempla el aumento anunciado en su momento.
A principio de este mes, el Gobierno nacional modificó los topes de consumo máximos subsidiados y las bonificaciones sobre los precios mayoristas de energía eléctrica y gas natural para los usuarios N2 (ingresos bajos) y N3 (ingresos medios) de acuerdo al Período de Transición establecido por el Decreto N° 465/24.