La enfermera de 48 años, que fue detenida por el CUFRE cuando salía a hacer las compras. Estaba prófuga desde 2012, cuando fue condenada a prisión perpetua

De entre los múltiples crímenes considerados como “satánicos” por la crudeza de su comisión, el de Ignacio Ramón González, conocido como “Ramoncito”, tiene un lugar destacado debido a la brutalidad con la que ese nene de 11 años fue torturado, ultrajado, asesinado y finalmente decapitado en la ciudad de Mercedes, a 230 kilómetros de la capital correntina.

Y si bien en un comienzo los investigadores creyeron que había sido víctima de un animal salvaje, lo cierto es que sus asesinos fueron seres humanos, convertidos en bestias sedientas de sangre durante la práctica de un rito en el que participaron al menos 10 personas.

Sin embargo, ese 7 de octubre quedaría marcado en la historia de la policía local por ser el día en que se cometió el primer “crimen ritual” comprobado por la policía, un hecho que llegó a ser estudiado en todo el mundo.

El niño, hijo de una mujer que se prostituía para poder mantenerlo, cayó en manos de ese grupo de personas que siguieron paso a paso las instrucciones de un libro de magia negra, y obligaron a una joven, que después resultó ser la testigo que los incriminó, a observar como sometían a ese nene, que hasta hace unas horas antes pedía monedas en la terminal de ómnibus de la ciudad, a lo inimaginable.

Al día siguiente, y tras comprobar que no había dormido en su casa, la madre de Ramoncito denunció la desaparición ante la Policía, por lo que se montó un operativo y tras 48 horas de rastrillajes, los vecinos hallaron en un baldío cercano el cadáver descuartizado del niño, quien había sido abusado sexualmente antes de ser descuartizado. Separada del cuerpo, los agentes encontraron la calavera del niño, a la que los salvajes habían desollado.

Mirá También:  Brasil: 21 muertos y más de 30 heridos en un accidente

Por ese crimen, 10 personas fueron a juicio y todas resultaron condenadas a prisión perpetua pero dos de ellos consiguieron evadir a la justicia.

Una de ellos es Patricia Mabel López, considerada como una de las diez personas prófugas más buscadas del país en un listado en el que figuran otros procesados por la justicia como Sebastián Romero, el manifestante del PO que disparó con un mortero a la policía en los disturbios del Congreso, en diciembre de 2017.

López, de 48 años, fue detenida por personal de la Prefectura Naval Argentina, en un procedimiento encubierto concretado en la localidad de González Catán, tras establecerse el domicilio en el que estaba residiendo.

La detención de López se produjo en la esquina de las calles Lavalleja y Ramos, de esa zona del partido de La Matanza, tras una larga investigación, en la que efectivos del Comando Unificado Federal de Recaptura de Evadidos (Cufre) obtuvieron el dato sobre su paradero y ordenaron el operativo a personal de la Delegación de Inteligencia e Investigación Criminal de Prefectura Naval- Río de la Plata.

«Luego de tareas que se extendieron durante dos años e incluyeron observaciones, vigilancias, patrullajes e intervenciones telefónicas, ya que la mujer cambió dos veces de domicilio, lograron dar con el lugar donde vivía actualmente y los efectivos se apostaron allí a esperar que saliera de la vivienda. Tras ser detenida y quedó alojada en una sede de Prefectura en calidad de incomunicada», indicó un comunicado sobre el procedimiento, que se realizó cuando la mujer salía a hacer las compras como cualquier otro vecino, gozando de una total impunidad.

Mirá También:  En Mendoza, una joven fue detenida acusada de homicidio

López se encontraba prófuga desde el 14 de mayo de 2012 tras haber sido condenada a prisión perpetua.

Deja un comentario

You May Also Like

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *