El PJ provincial renovará este domingo su conducción, en un acto eleccionario que se vio postergado dos años por la pandemia. El gobernador Juan Schiaretti no tendrá rivales en su postulación para presidir el partido, pero habrá pulseada en las urnas entre schiarettistas y albertistas en dos departamentos del interior: Punilla y Calamuchita.
El gobernador encabezará la histórica lista interna Movimiento de Unidad Peronista (MUP), creada por José Manuel de la Sota, que será la única boleta provincial. Schiaretti será consagrado como el próximo presidente del PJ cordobés.
Es probable que el gobernador pida licencia en el máximo cargo de conducción. En ese caso, el Consejo Provincial partidario deberá designar a un reemplazante.
Ya ocurrió en el período anterior. El gobernador no asumió la presidencia y fue designado presidente el entonces senador nacional Carlos Caserio, quien en 2019 renunció al cargo para sumarse al Frente de Todos nacional.
La lista provincial que encabeza Schiaretti está conformada por los principales dirigentes peronistas. Entre ellos, el intendente Martín Llaryora; el vicegobernador Manuel Calvo; ministros provinciales y secretarios municipales capitalinos. Además, de legisladores provinciales y nacionales e intendentes de las ciudades más importantes del interior.
En el armado de la estructura partidaria provincial, el gobernador exigió a sus operadores políticos que no fueran incluidos en la lista de unidad los dirigentes que adhieren al Frente de Todos.
Por esta decisión del mandatario provincial hubo febriles negociaciones en los distintos departamentos para lograr una lista única. Finalmente, en algunos lugares del interior no hubo acuerdo y este domingo habrá interna en Punilla y Calamuchita.
Cruce de denuncias
En Punilla, la disputa por la presidencia departamental será entre la legisladora provincial Mariana Caserio (albertista), que va por la reelección en el cargo, y el intendente de Huerta Grande, Matías Montoto, por el schiarettismo.
El líder histórico del PJ de Punilla es el exsenador Carlos Caserio, quien impulsa a su hija y al legislador provincial Miguel Maldonado para conducir el partido y representar al departamento en la Consejo Provincial.
Además, Caserio es el referente en Córdoba del presidente Alberto Fernández, por lo cual, el enfrentamiento en las urnas en el principal departamento turístico de la provincia tiene una connotación política que trasciende las fronteras de Córdoba.
Las diferencias políticas entre el gobernador Schiaretti y Caserio generaron un tenso clima de campaña en Punilla, donde los rivales se cruzaron denuncias de clientelismo político.
Montoto asumió la representación del schiarettismo. El intendente de Huerta Grande, quien llegó a ese cargo en 2015, por el vecinalismo, en una alianza con Caserio para derrotar al radicalismo, ahora se muestra como la “renovación” del_PJ de Punilla, con duros cuestionamientos al exsenador nacional.
Montoto aseguró que durante su larga trayectoria como funcionario provincial, Carlos Caserio nombró a más de mil empleados públicos provinciales, que viven en el departamento.
“Nuestra lista representa la renovación del PJ de Punilla, que hace 30 años es conducido por una pyme familiar. Nosotros queremos otra cosa para nuestro partido. No hacemos política para repartir cargos públicos. Somos los representantes de una gestión exitosa como la del gobernador Schiaretti. Mientras que nuestros rivales internos apoyan a un Gobierno nacional, sin rumbo”, afirmó Montoto.
El intendente cuenta con el respaldo del Gobierno provincial. La secretaria de Desarrollo Social de la provincia, Deborah Petrakovsky encabeza la lista de congresales provinciales. La funcionaria provincial es apuntada por los albertistas por el reparto de planes sociales durante la campaña.
Precisamente, Mariana Caserio le respondió a Montoto, denunciando reparto bolsones y asistencia estatal de la Provincia. “Montoto dice representar a la nueva política, y sin embargo, repartió bolsones y planes sociales de la Provincia de manera inmoral y vergonzosa. Además, no es peronista. Es un dirigente radical que hace unos pocos meses se afilió al partido y participa de la interna del peronismo. Todos los peronistas se Punilla saben de esta realidad”, dijo la legisladora provincial, que va por la reelección como titular departamental.
La lista que encabeza Mariana Caserio se denomina “Peronismo de Punilla”. La legisladora cuenta con el respaldo de nueve de los 10 intendentes peronistas del departamento. Los caseristas apuntan sus críticas hacia Montoto señalando que sus principales apoyos son dirigentes que no son peronistas: Esteban Avilés, titular de la Agencia Córdoba Turismo. El intendente de Villa Carlos Paz, Daniel Gómez Gesteira; el intendente de Cosquín, el socialista Gabriel Musso, y el defensor del Pueblo de Córdoba, Mario Decara, un dirigente radical.
Sin embargo, Avilés aclaró que él es un aliado a nivel provincial del PJ, como líder de un movimiento vecinal en Villa Carlos Paz, por lo cual no participa en la interna peronista.
En Punilla hay 14 mil afiliados. Pero durante la campaña, las dos listas han afiliado entre seis y siete mil personas en las últimas tres semanas, por lo cual, habrá alrededor de 20 mil personas en condiciones de votar.
En el PJ provincial, los interesados en participar se pueden afiliar hasta el mismo día de los comicios internos, para poder sufragar.
En Calamuchita
En este departamento también habrá este sábado una áspera disputa en las urnas. El schiarettismo estará representado por el intendente Santa Rosa, Claudio Chavero, encabezando la lista del Movimiento de Unidad Peronista (MUP).
Mientras que Federico Alesandri, intendente de Embalse, liderará la boleta que tiene el apoyo del legislador provincial Carlos Alesandri, histórico referente delasotista del departamento Calamuchita, que tiene un padrón de 4.500 afiliados. A este numero hay que agregarle los nuevos afiliados, que podrían duplicar la cifra original.
En el PJ aseguran que en este departamento habrá una disputa muy pareja, ya que los intendentes peronistas del territorio se reparten entre las dos boletas que se enfrentan.
En este territorio también hay una pulseada entre el schiarettismo y el albertismo. El intendente Chavero es un dirigente encolumnado con el gobernador Schiaretti e hizo campaña con las obras que la Provincia concretó en el departamento.
Mientras que Federico Alesandri fue funcionario nacional hasta hace pocos días, cuando decidió volver a la intendencia de Embalse, para competir en la interna partidaria. “Peronista y delasotista puro”, como se identifica, el intendente de Embalse cuestionó la postura del gobernador Schiaretti, quien se muestra crítico del Gobierno nacional. “No quiero un PJ cordobés chiquito, un partido provincial. Quiero un peronismo cordobés inserto en el PJ nacional”, argumentó Alesandri, quien va por su reelección en el departamento.
Chavero gobierna Santa Rosa, la ciudad más grande del departamento. También tiene el apoyo del intendente de Villa General Belgrano, Oscar Santarelli.
El intendente schiarettista no atendió los llamados de este medio, pero su campaña electoral se basó en resaltar el respaldo que tiene del gobernador y las obras que el Gobierno provincial concretó en el departamento.
