El senador bonaerense de Juntos, Marcelo Daletto, presentó un proyecto de ley para sancionar con una multa o arresto de hasta 30 días al paciente, familiar o acompañante que agreda física o verbalmente al personal de Salud de los hospitales de la provincia de Buenos Aires, sea del ámbito público o privado. También recibirá una pena aquel que amenace o perturbe el ejercicio de los profesionales.

En el texto, el legislador señaló que la iniciativa busca «reivindicar el derecho del personal de la Salud a ser respetado y no legitimar hecho de violencia alguno, teniendo en cuenta que en los últimos años se han incrementado de manera considerable ese tipo de hechos en ese ámbito». Y agregó: «Desde el inicio de la pandemia por el COVID-19, el personal de la Salud ha sido el recurso más valioso para la sociedad y si bien la mayoría de la población ha valorado su trabajo una pequeña parte han ejercido actos de agresión en centros de testeo, en unidades de emergencias, en centros de salud e incluso fuera de los lugares de trabajo».

En esa línea, remarcó que «violencia de todo tipo y robos son situaciones cotidianas a las que se ven expuestos el sector sanitario en sus lugares de trabajo. Por eso, es necesario que como Estado provincial se intervenga sobre tales hechos para garantizar derechos humanos fundamentales de los ciudadanos como el derecho a la Salud y el derecho a trabajar sin agresiones», finalizó el senador.

Tal como informó 0221.com.ar, en los últimos meses se multiplicaron los hechos de violencia en las guardias de los hospitales públicos. En ese marco,  la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (CICOP) también manifestó su preocupación ante los hechos de violencia que padecen los médicos en los hospitales y advirtió que tomarán medidas gremiales frente a cada futuro caso.

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En un comunicado, los profesionales nucleados en la CICOP habían manifestado que «la solución al problema de la violencia en los hospitales vendrá de la mano de presupuestos acordes que puedan garantizar el derecho a la salud de la población y el derecho al trabajo en condiciones dignas de las y los trabajadores», una visión que plantean «lejos de buscar una salida punitivista a la presente situación».

«Vemos con honda preocupación los diferentes episodios de violencia hacia trabajadoras y trabajadores de la salud, cuyo único crimen es continuar dando respuesta en el marco de un sistema sanitario con profundas deficiencias luego de décadas de inversiones insuficientes», expresaron. «Repudiamos cada episodio de violencia hacia los y las trabajadores de la salud y tomaremos medidas gremiales frente a cada uno de ellos», advirtieron en el gremio.

«Exigimos a las autoridades de gobierno políticas inmediatas para garantizar la integridad del equipo de Salud, a la par que seguimos reclamando presupuestos suficientes que permitan encarar los problemas estructurales de nuestro sistema de salud», agregaron y recordaron que «el equipo de Salud viene dando la batalla contra la pandemia de COVID-19 desde la primera línea y desde el día uno, dando los mejores esfuerzos en un marco de adversidad sin precedentes».

«Cuando las vacunas no existían y los equipos de protección personal escaseaban, los y las integrantes del equipo de Salud estuvieron para garantizar el derecho a la atención sanitaria de la comunidad», concluyeron.

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