Héctor Marisi tenía 74 años. Fue hallado sin vida en su casa tirado boca abajo y atado de pies y manos. No le robaron nada. Como era prestamista, creen que se trató de una venganza por el reclamo de una deuda
Un jubilado fue asesinado a golpes en la cabeza con una pala y su cuerpo fue hallado atado de pies y manos en el galpón del fondo de su vivienda en la ciudad bonaerense de Chacabuco. Si bien se apuntó a un homicidio en ocasión de robo, por el testimonio de los familiares del hombre se estableció que no se advirtieron faltantes de objetos de valor y tampoco desorden propio de un asalto en condiciones violentas. En tal sentido, ahora los investigadores del caso intentan determinar el móvil de este crimen.
El crimen de Héctor Marisi, de 74 años, fue descubierto por su cuñada, quien al dirigirse al domicilio porque no contestaba los mensajes y llamadas telefónicas, se sorprendió al no verlo en la parte delantera de la casa y que el galpón que era utilizado como garaje estuviera cerrado con la llave colocada en la cerradura. Al abrir encontró el cuerpo ya sin vida, tirado boca abajo y maniatado con cintas. Presentaba un fuerte golpe en la nuca y había abundante sangre alrededor.
Tras llamar al 911 y luego de la intervención del personal policial, los investigadores determinaron que por ciertas características no se habría tratado de un crimen en ocasión de robo y como una de las hipótesis principales se apunta a la actual actividad de este jubilado, ya que trascendió que realizaba préstamos de dinero a personas residentes en las afueras de Chacabuco.
En consecuencia, el asesinato podría ser cometido en el marco de una venganza por el reclamo de una deuda, según trascendió y en tal sentido, se efectuó un rastreo de sus comunicaciones en días previos.
En base a los testimonios de sus familiares, Marisi fue visto con vida por última vez en la noche del pasado jueves, luego de salir en su auto hacia su casa y desde ese momento se dejó de tener contacto. Por lo datos preliminares de la autopsia se desprende que la data de la muerte correspondería al viernes en horas del mediodía. Más tarde, el cuerpo sin vida fue encontrado por su cuñada Dora Cisneros.
El fiscal Daniel Nicolai, a cargo de la investigación, dispuso que personal de la Policía Científica levantase rastros en la escena del crimen, mientras aguarda el restado de otras pericias y de la autopsia, concretada en la Morgue Judicial de Junín.
«Marisi estaba vestido, tenía las manos maniatadas con cinta, fue amordazado y también la cabeza atada, como ocultando las heridas cortantes sufridas en la parte posterior del cráneo. Al parecer, lo golpearon con una pala ancha que el septuagenario guardaba en este galpón y que fue hallada en el lugar, con restos hemáticos», se indicó.
Según contó la hija del jubilado al sitio El Chacabuquero, su padre había sufrido un asalto en el que también lo ataron tiempo atrás y por eso, decidió instalar un sistema de alarma y luego de ese episodio de inseguridad, padeció otro intento de robo. De allí que, en principio, se creyó que lo mataron ante una reacción, pero al no faltar ninguna de sus pertenencias, se descartó esta hipótesis.
