El INDEC informó que la canasta que mide la pobreza tuvo en abril un aumento del 3,4% y la que mide la indigencia uno del 3,9%, con una inflación del 4,1%.
Una familia de cuatro integrantes necesitó en abril $ 62.957,54 para no caer debajo de la línea de pobreza y $ 26.676,93 para no estar catalogada dentro de la indigencia, de acuerdo con lo informado este martes por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
El informe indicó además que los gastos necesarios para no caer en la pobreza tuvieron un aumento mensual del 3,4% e interanual del 47,8%, en tanto los de indigencia lo hicieron en 3,9% y 49,1%, respectivamente.
Al respecto, la inflación de abril fue de 4,1% y la acumulada en los últimos doce meses de 46,3%, es decir que los gastos de pobreza e indigencia aumentaron menos que los precios en general en abril, pero los superaron en la medición interanual.
Los recursos mencionados no incluyen gastos de alquiler de vivienda ni de expensas comunes, por no ser considerados gastos de consumo. Si se los sumara, los ingresos necesarios para superar el umbral de la pobreza para una familia de cuatro miembros se acercaría a los $100.000, de acuerdo con estimaciones de diferentes economistas.
La información fue dada a conocer pocos días después de que se resolviera un incrementos escalonado del salarios mínimo, vital y móvil del 35 por ciento hasta febrero del año que viene, con lo que recién para entonces alcanzará el nivel suficiente para cubrir la canasta de pobreza de abril de 2019, es decir un rezago de casi tres años.
La línea de pobreza para un adulto equivalente fue fijada para abril en $ 20.374,61, en tanto la de indigencia fue de $ 8.633,31.
En el caso de una familia de cuatro integrantes, esos valores fueron establecidos por el organismo dirigido por Marco Lavagna en $ 62.957,54 y $ 26.676,93, respectivamente.
