La denuncia por abuso sexual agravado en contra el sacerdote catamarqueño Renato Rasgido fue radicada en 2014, desde entonces la defensa del cura dilató el proceso judicial una y otra vez obligando a la Cámara de Apelaciones de la provincia a decidir en consecuencia. Hoy, a las 10 los camaristas deberán volver a resolver si la causa debe ser juzgada por un tribunal penal.

En marzo de 2014, la madre de un adolescente denunció que su hijo fue abusado y corrompido sexualmente por el sacerdote en el que ellos confiaron. Los hechos sucedieron en el departamento Andalgalá y ella supo lo que ocurría luego de salvar a su hijo quien intentó de suicidarse amedrentado por el sacedote.

Rasgido fue el primer sacerdote de la diócesis de Catamarca en ser denunciado por abuso sexual. Cuatro fiscales se inhibieron en aquel momento de investigar la causa, hasta que la fiscala Marta Nieva decidió llevarla adelante. El proceso dilatorio encarado por el defensor del cura fue evidente, al punto de que la causa llegó a ser elevada a debate 3 veces, en 2019, 2020 y la última vez en abril de 2021, cuando volvió a apelarla.

El cura, fue acusado por los delitos de abuso sexual simple agravado, abuso sexual simple en concurso ideal con corrupción de menores y abuso sexual con acceso carnal agravado en concurso ideal con corrupción, todos agravados por la condición de ministro de culto.

Durante el largo proceso Nieva se jubiló y será otro representante del Ministerio Público Fiscal de la provincia el que deba tomar el expediente de acuerdo a lo que decida hoy la Cámara de Apelaciones.

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La audiencia se realizará de manera presencial. Según confirmó la abogada del sobreviviente, Silvia Barrientos, el sobreviviente estará presente.

Denuncia

Los hechos denunciados contra Rasgido, ocurrieron en mayo y noviembre de 2012 cuando el sobreviviente tenía 13 años. Según el relato del adolescente, sucedieron en la parroquia Andalgalá, y también en la Casa Parroquial de la localidad de Aconquija.

Rasgido no fue nunca detenido pese a la grave imputación en su contra y los reiterados pedidos de la querella. El cura amedrentaba al niño y lo amenazaba para que  no cuente lo que le hacía.

Derrotero

Desde que Rasgido fue denunciado, cuatro sacerdotes más, todos de la diócesis de Catamarca fueron denunciados por hechos de abuso sexual cometidos contra niños y niñas.

En 2015, el Juan de Dios Gutiérrez fue acusado por cometer abusos contra una adolescente en el departamento Belén. En abril del año pasado y luego de 6 años de dilaciones, Gutiérrez se convirtió en el primero en ser condenado a 12 años de prisión aunque recién el miércoles de la semana pasada fue llevado a la cárcel luego de que la sentencia quedara firme.

En 2018 monseñor Moisés Pachado, quien ostentó durante muchos años el cargo de Vicario General de la Catedral Nuestra Señora del Valle, fue acusado por abusar de una niña. Ésta causa aún está en proceso, y el cura fue imputado por los abusos.

En diciembre de 2021, el párroco Eduardo López Márquez y el cura Pablo Batallán (ya fallecido) fueron acusados por violar a un niño de 12 años. La fiscala que debía investigar la causa y sin que mediara un pedido de la defensa del sacerdote, decidió por iniciativa propia beneficiarlo dando la causa por prescripta. La decisión fue apelada este mes por los abogados del denunciante quienes solicitaron además, un jury para la fiscala.

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