Qué le pasa al cerebro cuando leemos
Lo primero que hay que tener en cuenta es la transición desde la oralidad hacia la lectura, ya que ambos son procesos sumamente distintos. Sin embargo, la lectura incluye un esfuerzo mental más complejo, ya que consiste en interpretación del vocabulario y la sintaxis.
Asimismo, esto lo relacionó con la hipótesis del “reciclaje neuronal” realizada por Stanislas Dehaene, un investigador francés. Esta refiere a que si bien no tenemos una zona del cerebro que esté predispuesta a procesar las letras, en el cerebro se recicla un área que originalmente era utilizado para procesar cuestiones espaciales y de las líneas horizontales y verticales.
En esa misma línea, De Mier explicó que a través de la «caja de letras», las personas lectoras almacenamos representaciones, que nos permiten identificar cualquier letra, sin importar su tipo de caligrafía. Además, resaltó que es importante una enseñanza explícita para obtener capacidad lectora, y que se debe fijar el conocimiento con la práctica y la repetición.