El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos pronostica que los vientos llegarán a 250 km/h. La tormenta arribará en la misma fecha que el huracán Katrina.

La tormenta Ida ganaba fuerza con rapidez el domingo por la mañana y se convirtió en un peligroso huracán de categoría 4 horas antes de impactar la costa de Luisiana, Estados Unidos.

Ida alcanzó la categoría 4 varias horas antes de lo previsto por el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. La tormenta llegará en la misma fecha que el huracán Katrina, que devastó Luisiana y Mississippi hace 16 años.

Las autoridades de emergencias se apresuran a abrir refugios para personas desplazadas pese a los riesgos de contagio de coronavirus.

El huracán ganó fuerza con rapidez a su paso sobre el Golfo de México y pasó de tener vientos de 72 kilómetros por hora (45 millas) a la 1 de la madrugada a registrar vientos máximos de 230 km/h (150 mph ) unas horas después.

El domingo temprano, el centro del sistema estaba unos 95 kilómetros (60 millas) al sur de la desembocadura del río Mississippi y 120 kilómetros (75 millas) al sur-sureste de Grand Isle, Luisiana. Se desplazaba hacia el noroeste a 24 kilómetros (15 millas) por hora.

El centro de huracanes pronostica que los vientos de Ida llegarán a 250 km/h (155 mph), apenas 10 km (6 millas) menos de un huracán de categoría 5. Solo cuatro huracanes de categoría 5 han tocado tierra en Estados Unidos: Michael en 2018, Andrew en 1992, Camille en 1969 y el huracán del Día del Trabajo de 1935.

Por otra parte, los meteorólogos informaron el domingo que se formó la tormenta tropical Julian en el Atlántico, pero no representa una amenaza para la tierra. Por el momento no se emitieron alertas.

Mirá También:  ANSES. CALENDARIOS DE PAGO DE HOY MARTES 10 DE AGOSTO

El centro de huracanes indicó que Julian está a unos 1.400 kilómetros (865 millas) al sur-sureste de Cape Race, Terranova, y sus vientos máximos sostenidos eran de 85 kilómetros por hora (50 millas). Se prevé que la tormenta se disipe para el lunes.

Ida amenazaba a una región ya afectada por un brote de COVID-19 impulsado por las bajas tasas de vacunación y por la contagiosa variante delta del coronavirus.

Los hospitales de Nueva Orleans tenían tenían previsto capear la tormenta casi a plena capacidad, ya que hospitales de otros lugares, sujetos a una presión similar de la pandemia del coronavirus, tenían poco espacio para pacientes evacuados. Y los refugios para personas que huían de sus hogares planteaban un riesgo adicional de convertirse en focos de infección.

Deja un comentario

You May Also Like

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *