El cuerpo se convierte en un importante elemento de desigualdad, en una sociedad donde los cánones y parámetros construidos sirven para definir los que están dentro o los que están al margen de la misma.
En este sentido, la visión del cuerpo se caracteriza por el predominio de unos valores corporales en torno a lo bello, lo hermoso, lo perfecto, es decir sobre la base biológica hay un cuerpo construido con una dimensión sociocultural importante. Estos valores, a su vez, son asumidos por los individuos, que los interiorizan y asumen como propios de su sistema cultural, tratando de modelar su cuerpo para aproximarse a ese canon de belleza.
“Es importante que todos como sociedad, podamos reflexionar sobre el respeto por la diversidad de los cuerpos, y en este sentido la Educación Sexual Integral (ESI) desde las infancias es una herramienta fundamental para poder abordar el tema.
Es imprescindible poder discutirlo en los distintos ámbitos y espacios para poder intercambiar herramientas y mejorar la relación con nuestro propio cuerpo o imagen y la manera en que nos expresamos sobre los cuerpos de los demás” expresó la directora de Políticas de Género, Yanina Gazzaniga.
Cabe mencionar que el estigma es una condición, atributo, rasgo o comportamiento que hace que la persona portadora sea incluida en una categoría social hacia cuyos miembros se genera una respuesta negativa y se les ve como inaceptables o inferiores.
