Días pasados dimos cuenta en INFOZONA que el vecino de la ciudad de Chascomús, Mateo Colich denunció que un perro galgo de su propiedad que lo tenía como mascota y se había extraviado, fue cruelmente asesinado.
Hizo saber el chascomunense que el can era incapaz de causar daño alguno e incluso estaba imposibilitado de correr por una dificultad física en una de sus patas.
Refirió en su relato que el animal era transportado en una camioneta de la que descendió y pese a los reiterados intentos por hallarlo no fue posible localizarlo pero a las pocas horas fue encontrado sin vida y colgado de su hocico y de una de sus patas de un alambrado perimetral de un campo.
Tal atroz hecho provocó la indignación de gran parte de la comunidad de toda la región.
En las últimas horas comenzaron a circular una serie de capturas de pantalla a través de WhatsApp mediante las cuales quien fuera el agente de la policía de la Provincia de Buenos Aires, Fernando Pengsawhth se autoadjudicaría la autoría del atroz asesinato.
Recordemos que Pengsawath fue uno de los dos policías baleados en la madrugada del 31 de Diciembre de 2015 en la ruta provincial 20, entre Ranchos y Chascomús, por Víctor Schillaci y los hermanos Cristian y Martín Lanatta, recibiendo 3 tiros, dos le atravesaron el abdomen y uno le agujereó el empeine. Los siguientes 23 días estuvo en coma al borde de la muerte y, como consecuencia de este brutal ataque, debió pasar 36 veces por el quirófano en una clínica de la Capital Federal.
En las capturas de pantalla que comenzaron a circular en las últimas horas, se puede leer que Pengsawath pregunta si alguien tiene una “caravina 22 en venta” (sic) “No importa si está flojito de papeles. Es para matar perros en el campo” afirma el texto escrito por el ex policia.
Seguidamente comparte las fotografías del perro brutalmente asesinado y colgado de un alambrado de un campo cercano a Chascomús y agrega “funciona el eléctrico, gracias a Dios”, para rematar más adelante con el siguiente texto “Lo hicimos cagar a las 8 y 30”.
Rápidamente tales afirmaciones se viralizaron y el propietario del perro asesinado le escribió al ranchero solicitándole explicaciones de lo ocurrido, no sin subrayar que se sentía muy mal por el crimen de su perro y la impotencia que sentía.
Fernando Pengsawhth negó haber matado al can y atribuyó todo a una broma “de mal gusto” e incluso se presentó en la Estación de Policía Comunal de Ranchos donde efectuó una denuncia contravencional para que sea la Justicia que investigue el caso y dictamine si tuvo alguna responsabilidad sobre el mismo.
Asimismo a través de las redes sociales, efectuó un descargo señalando que había enviado un mensaje a Colich e incluso que intentó comunicarse telefónicamente pero no obtuvo respuesta, afirmando que él no mató al perro.
“Yo formo parte de un grupo de Whatsapp en el cual le quise hacer una broma (de hecho, de muy mal gusto) a uno de sus integrantes, reconozco haber hecho esa broma, joda o estupidez como más le guste llamarlo, jamás tomé dimensión de lo que eso podía causar en Mateo, en sus allegados y en la sociedad, realmente estoy arrepentido de eso….” afirmó el ex agente de la bonaerense.
Más adelante continuó “Y viéndome escrachado socialmente por un hecho que yo no cometí, me dirigí a la comisaria de Ranchos (lugar donde resido) a exponer que estoy abierto y dispuesto a someterme a cualquier tipo de investigación la cual crean pertinente para corroborar que yo no soy autor de lo que se me acusa, al no poder realizar una exposición legal, porque no se puede, hasta llegar a una instancia judicial, realice una denuncia contravencional para que todo esto llegue a una instancia judicial y para que, quien tenga alguna prueba fehaciente de lo que se me acusa pueda presentarla sin ningún drama, además para que puedan someterme a la investigación que sea necesaria y puedan corroborar que lo que digo es la verdad”
Lejos de calmar los ánimos en la sociedad, el descargo de Pengsawath causó mayor rechazo de la población y a través de las redes sociales se repudia el mismo.
Trascendió extraoficialmente que el propietario del perro radicaría la pertinente denuncia y acudiría a la Justicia con las pruebas que posee (fotografías del perro asesinado y capturas de pantalla) acusando a Fernando Pengsawhth de cometer un acto de crueldad animal (Ley 14.346. Ley de malos tratos a animales, Art 3.)
