El incendio lleva semanas y quemó más de 9 mil hectáreas

Con lluvia de pedidos de auxilio para detener la destrucción del ambiente de Yungas, y reto del INAI mediante, la Provincia mandó ayuda. Se apagaron dos frentes, pero hay focos que persisten. 
Finalmente, tras reiterados pedidos de ayuda, incluso de organismos de derechos humanos, el gobierno de Salta anunció ayer el envió de ayuda para combatir el fuego que avanza en la zona de sierras subandinas de las Yungas, en territorio de a Comunidad del Pueblo Kolla Tinkunaku, en el departamento Orán. Para entonces ya 40 integrantes de los ayllus Los Naranjos y San Andrés, a los que se unieron miembros de Bomberos Voluntarios de San Ramón de la Nueva Orán, peleaban contra el fuego a pico, pala y machete, azotando las llamas con ramas y haciendo cortafuegos para dejarlo sin material combustible. Con esa técnica lograron sofocar los frentes norte y noroeste, aunque el fuego sigue en otros dos frentes, y aquí se mantiene el peligro de que puedan reactivarse focos, debido al calor generado y a que han quedado brasas en árboles añosos, como queñuos y alisos, advirtió el comunero Ceferino Zárate, uno de los representantes kollas en el Consejo de Participación Indígena del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI).

Precisamente, la presidenta de este organismo nacional, Magdalena Odarda, solicitó al ministro de Seguridad de Salta, Juan Manuel Pulleiro, «que coordine los esfuerzos con el Ministerio de Seguridad de la Nación, en el ámbito de sus competencias, en aras de que se arbitren todos los mecanismos que estén disponibles a implementar, a fin de sofocar el extenso incendio forestal«, se informó ayer en un comunicado.

El INAI también expuso que el gobierno de Salta demoraba la ayuda nacional. «Si bien el INAI tiene conocimiento de que el Ministerio de Seguridad de Nación se encuentra a disposición, a la espera de la convocatoria por parte de las autoridades de la provincia de Salta, a la fecha no se ha concretado«, sostuvo antes de señalar que la urgencia «deviene imperioso el trabajo mancomunado de las autoridades de todos los niveles; gobierno local, provincial y nacional para enfrentar la situación».

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Asimismo, el organismo nacional le solicitó al gobierno salteño que «a título de especial colaboración» le informe «sobre las actuaciones, dictámenes, informes confeccionados en relación a la cantidad de hectáreas afectadas y relevamientos de los daños materiales a la población indígena de los ayllus afectados». Y solicitó también al Ministerio de Seguridad de Salta que «se dispongan acciones adecuadas y eficientes para proteger la integridad física de los miembros indígenas y bienes intangibles de inefable valor para el pueblo Kolla».

El domingo ya se sabía por las redes sociales que había intervenido la diputada nacional Verónica Caliva (FdT) tratando de que la provincia habilitara el uso de un avión hidrante de la Nación, ayuda que las autoridades de Tinkunaku y habitantes de la zona vienen pidiendo desde que se inició el incendio, en la primera semana de este mes. Y en la ciudad de Salta, ambientalistas e integrantes de organismos de DDHH reclamaban públicamente que la Provincia respondiera los pedidos de auxilio.

Por la mañana, Ariel Alarcón, integrante del Consejo Comunitario Kolla de San Andrés, informó que la propia comunidad, con la ayuda de habitantes de Orán, y la Municipalidad de esa ciudad, se había organizado para combatir el fuego, al que veían demasiado cerca de algunas casas en la zona conocida como El Queñual.

«Fueron 6 bomberos. Trabajaron alrededor de 40 personas de Los Naranjos y San Andrés a pala, pico y machete», relató Zárate a Salta/12.

«En el día de hoy hemos terminado de sofocar/apagar el incendio que asechaba la parte alta de Los Naranjos, (Duraznal/ Queñual). Unas 40 personas de Los Naranjos y 4 personas de San Andrés, estuvimos desde el sábado hasta hoy al medio día, hora en que terminamos de controlar el último foco de fuego», informó en un comunicado el Consejo comunitario de Los Naranjos, que agradeció la ayuda de habitantes oranenses y Bomberos Voluntarios. El Consejo aclaró que este foco estaba del lado norte y noroeste de las serranías, y que seguía ardiendo del lado sur y sureste, donde también hay dos comunidades.

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Zárate explicó precisamente que se extinguió parte del fuego. «Quedan otros frentes muy activos del lado de Patani, otro en Santa Cruz, todo en el mismo territorio de la misma Comunidad Tinkunaku», indicó. Ayer mismo salieron grupos de hombres de la Comunidad desde la zona baja de Angosto y Río Blanquito para combatir el fuego en esa zona, con la misma técnica usada del otro lado. Ese frente está a un día de camino por zona de montaña.

«Del lado de San Andrés quedan puntos activos», porque «el fuego no se extingue de un día para el otro, simplemente porque hacia la parte más baja de la ladera existen bosques de alisos y queñuos, árboles gruesos y están en parte inaccesibles, y también son varios frentes», explicó el consejero del INAI. Una fotografía satelital muestra al menos cinco puntos de fuego activos.

La Provincia informó que ayer salió una comisión de la Brigada Forestal «para reforzar el trabajo operativo con Bomberos Voluntarios de Orán y Aguas Blancas para combatir focos que se reactivaron en un incendio forestal de más de tres mil metros de altura». 

Añadió que a través de la Subsecretaría de Defensa Civil, el Ministerio de Seguridad de Salta está coordinando «el trabajo operativo con los distintos organismos de la Provincia, Municipio, y el Servicio Nacional de Manejo de Fuego que intervienen en el incendio forestal de más de tres mil metros de altura registrado en las sierras subandinas entre La Tablada y San Andrés en el departamento Orán». Indicó que «se articuló un nuevo vuelo de reconocimiento con el Sistema Federal de Manejo del Fuego».

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El gobierno provincial se preocupó en aclarar que los focos se reactivaron este fin de semana último, y que el fuego «se encuentra distante a las comunidades originarias».  Además, destacó que «se viene trabajando de manera coordinada con los distintos organismos en las tareas de relevamiento, estudio de territorio, acciones preventivas; y sobrevuelo por la extensa zona afectada desde su inicio».

Aunque esta información no coincide con lo que sostienen los habitantes originarios de la zona, que venían insistiendo con el pedido de auxilio, reseñando que no lograban atención de las autoridades.

El subsecretario de Defensa Civil de la provincia, José Arce, enfatizó que la gente del lugar «no corre riesgo, porque los focos ígneos están distantes de las zonas pobladas». También dijo que el incendio estaba «circunscrito a las alturas». Aseguró que en los últimos días «con los calores del último fin de semana se generaron nuevos focos ígneos, entonces se decidió ya hacer la intervención».

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