Obras de las artistas argentinas Valentina Liernur y Mercedes Azpilicueta se exhibirán como parte de Fondamenta, la plataforma online de Artissima, que se desarrolla desde este viernes y hasta el 5 de julio de manera virtual, como antesala de la feria física que tendrá lugar en noviembre próximo en la ciudad italiana de Turín.
«Fondamenta es un proyecto que se ofrece, de forma gratuita, a las galerías que participaron en Artissima 2019, como una forma de apoyar a nuestras galerías en un momento de estancamiento del mercado del arte», explicó a Télam Ilaria Bonacossa, directora de Artissima, la feria de arte contemporáneo más importante de Italia.
Cada galería mostrará de manera virtual la obra de un artista seleccionado, por lo que habrá cerca de 200 obras en total que no deben superar los 15.000 euros cada una, tal como fue la consigna sugerida por los organizadores.
Fondamenta «es una invitación a experimentar y responder de manera creativa al frenético estancamiento en el que nos encontramos en este desafiante presente», enfatizó Bonacossa.
Si bien la propuesta incluirá las obras exhibidas en 2019, la idea de Fondamenta no está pensada como Online Viewing Rooms ni tampoco como un sustituto de la feria presencial, sino que se concibe como un work in progress de cara a la próxima edición que tendrá lugar del 6 al 8 de noviembre en Turín, y que se llevará a cabo con «conciencia covidiana», en palabras de Bonacossa.
De este modo, la galería Nogueras Blanchard de España optó por mostrar el trabajo de Mercedes Azpilicueta, mientras que la galería Campoli Presti con sede en Londres y París, se decidió por el trabajo de Valentina Liernur, cuya obra fue elegida además, por el equipo curatorial, como uno de los imperdibles de esta muestra online.
La obra «Freedom 2» (2015), de Liernur, que se puede ver en el stand digital de la galería Campoli Presti, es una pieza realizada con denim, alfileres y -curiosamente- con lavandina común, «la misma que se usa ahora para matar al Covid», dijo Liernur a Télam.
«Hoy en día cambiaría el título a la obra a No Freedom, directamente. Cuando la hice, estaba interesada en el Denim por ser un material ambiguo, genérico, popular y elitista, donde lo individual se junta con lo colectivo. Un material con el que una mayoría se puede relacionar y que pareciera dar lugar a las expresiones mas subjetivas del ser», explicó la artista.
«Digamos que cada uno elije su estilo de jean -prosiguió-, el tipo de azul que prefiere, el tipo de agujeros que quiere o no quiere. Estaba interesada en el lenguaje de esos detalles en las piernas de la gente, que son como un bricolage en el que se expresan códigos subculturales, códigos de clase, y tanto aspiraciones como presiones».
Además, los tajos y agujeros de la obra aluden a «evocaciones históricas y políticas», añadió.
En tanto, el stand digital de la galería Nogueras Blanchard presenta la obra de Mercedes Azpilicueta «The Captive: Here’s a Heart for Every Fate», un tapiz de estética barroca, con detalles superpuestos de pinturas históricas, y fragmentos que aluden a la leyenda de la cautiva Lucía Miranda, la primera mujer europea en ser capturada por los pueblos originarios a su llegada a Argentina en el siglo XVI, en base a la narración de la escritora Eduarda Mansilla.
La obra de Azpilicueta forma parte de la sección «Present Future» de la feria, que reúne «artistas que esbozan un paisaje visionario del futuro, con impacto en el pensamiento crítico», en palabras de las curadoras Ilaria Gianni y Fernanda Brenner.
También la galería argentina Walden estará presente en Fondamenta con obras del colectivo de artistas mexicanas Polvo de Gallina Negra, un grupo feminista fundado en 1983 por Maris Bustamante y Mónica Mayer.
De cara a la edición de noviembre 2020 de la feria, Ilaria Bonacossa adelantó que «dadas las restricciones a nivel mundial, prevemos una feria más pequeña, más eurocéntrica, con un control del flujo de público, reservas previas y las franjas horarias específicas que se dan a los visitantes como una forma de crear un entorno seguro en el que hablar y descubrir arte».
«Creo que el mundo del arte ha experimentado una importante transformación digital que llegó para quedarse. Sin embargo, la sobreexposición digital a la que hemos sido sometidos ha demostrado que no todo funciona de la misma manera», sentenció.
«La narración de historias y el elemento humano detrás de la interacción digital son los que pueden crear un compromiso real y potenciar las transformaciones de cómo experimentamos el arte. Las herramientas digitales son espacios en los que se puede desarrollar un compromiso con nuevos públicos», opinó la directora de Artissima.
Para esta italiana curadora y crítica de arte, reelegida hasta 2021 como directora de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo Artissima, «durante la próxima década, los galeristas deberán convertirse en verdaderos empresarios -no sólo curadores-, que planifiquen estratégicamente el desarrollo de su negocio y su crecimiento».
– Télam: ¿Cómo será la edición de noviembre de Artissima?
– Ilaria Bonacossa: La feria se está planificando desde una perspectiva de conciencia covidiana. Imaginamos una feria más pequeña, centrada en la sección principal como una forma de apoyar a las galerías en su actividad, una forma de «volver a las raíces» de lo que es una feria de arte. La cuarentena ha hecho que 2020 sea un año difícil para el mundo del arte y estamos desarrollando Artissima teniendo en cuenta que será uno de los primeros momentos en que el mundo del arte pueda volver reunirse y demostrar su vivacidad. La mayor diferencia estará relacionada con el control del flujo de público, reservas previas y las franjas horarias específicas que se darán a los visitantes como una forma de crear un entorno seguro en el que hablar y descubrir el arte. Estamos trabajando en la creación de un espacio más íntimo para el disfrute del arte, relajado, donde se mantengan fácilmente las distancias seguras.
Se puede acceder a Fondamenta a través de la web artissima.art.
