Llegó a una altura de sólo 8 cm el jueves pasado

Un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, con datos del Servicio Meteorológico Nacional, indicó que el Río Paraná llegó a una altura de sólo 8 cm el jueves pasado en el hidrómetro ubicado en Rosario. A su vez, advierte que el fenómeno, que no ocurría desde diciembre de 1971, está provocando considerables pérdidas económicas debido a que redujo la capacidad de carga de los buques que transitan por el río.

El estudio precisó que el calado máximo permitido en las terminales de Rosario, San Lorenzo y Timbúes se encuentra en torno a los 29 pies, contra un calado habitual de 34. De esta manera, se incrementaron las precauciones que deben tener los operadores a la hora de cargar los buques, lo cual implica el recorte de los volúmenes que pueden embarcarse por unidad. “Estimando una pérdida promedio de capacidad de carga de sólidos para buques de tipo Panamax (o similares) de unas 2.000 toneladas por cada pie perdido de calado, podríamos decir que la bajante les está costando a los operadores la posibilidad de cargar unas 10.000 toneladas por cada buque de este tipo que sale del Gran Rosario”, agregó el reporte.

Para ejemplificar la situación, se mencionó que todavía no se pudo solucionar la varadura que sufrió este miércoles el buque MV MSXT ARTEMIS, operado por la compañía ADM, hecho que provocó la paralización de actividades en los muelles de la Unidad 6 de Rosario, donde se dieron de baja todos los cupos de descarga de camiones con fecha del día jueves. “Esto aportó más complicaciones a la logística de entrega en plena cosecha de la gruesa, y aún más considerando que se estaba priorizando la celeridad en la descarga, dados los pronósticos de precipitaciones en los próximos días en gran parte del área”.

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En tanto, el Instituto Nacional del Agua (INA) y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informaron que en el trimestre de mayo-junio-julio no se esperan lluvias significativas en la cuenca del río Iguazú, la cuenca no regulada del río Paraná en Brasil y la cuenca misionero-paraguaya del Paraná. “Por lo tanto, la recuperación fluvial deberá esperar a la segunda mitad del invierno, en principio con baja probabilidad de una recuperación sensible”, señalaron.

Organizaciones socioambientales nucleadas en el colectivo “Dos orillas”, por su parte, enviaron este miércoles una nota a los gobernadores de Santa Fe y Entre Ríos para manifestarles su preocupación por los impactos sociales y ecosistémicos que está generando la bajante extraordinaria del río Paraná. Entre otras cuestiones, exigieron políticas públicas inmediatas y mancomunadas para salvaguardar los bienes naturales y las comunidades y habitantes que viven y desarrollan sus economías en las regiones afectadas.

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