El ministro de Transporte oficializó que no habrá subas por 120 días en el boleto de colectivos y trenes de Capital Federal y el conurbano bonaerense. Dijo que harán una “revisión de la política de subsidios”.
El gobierno confirmó que las tarifas de trenes y colectivos del Área Metropolitana de Buenos Aires no aumentarán por 120 días. La medida beneficia a unos 15 millones de pasajeros y se suma al congelamiento de las facturas de gas y electricidad también por seis meses y a la reciente suspensión del incremento en los combustibles que tenía previsto aplicar YPF. De este modo, el gobierno busca ponerle freno a la inflación y ayudar a recomponer el poder adquisitivo de los sectores más postergados. «Se acompaña una política del Estado para cuidar al conjunto de la sociedad en un factor clave de la vida cotidiana de las familias que es el transporte público», aseguró el ministro de Transporte, Mario Meoni, quien realizó el anuncio junto al jefe de Gabinete Santiago Cafiero.
Meoni confirmó además que durante el plazo que dure el congelamiento van a revisar la política de subsidios para toda la zona metropolitana. «Es necesario eficiantizarla, transparentarla y dar mayor equidad en este reparto de fondos del Estado. El ministro aseguró a su vez que “no hay razones para aumentar” y justificó sus dichos haciendo referencia al freno que se le aplicó a la suba de los combustibles.
“Entendiendo además que la medida que tomó el Presidente con respecto al no aumento de combustibles en este período también impacta de manera importante sobre las empresas transportadoras de personas, con lo cual sus costos no va a tener un impacto mayor y por lo tanto no hay razones por las que trasladar o aumentar las tarifas», sostuvo. De ese modo, el funcionario dio por hecho que el precio del gasoil no sufrirá cambios por el mismo período, algo que todavía no fue confirmado oficialmente ya que hasta ahora lo único que frenó el aumento de combustibles fue una llamada del presidente Alberto Fernández al titular de YPF, Guillermo Nielsen.
Si bien durante el plazo que dure el congelamiento, el Estado Nacional continuará cubriendo parte de las tarifas mediante subsidios, ni Meoni ni Cafiero dieron detalles sobre el costo fiscal de esta decisión e insistieron en que la estabilidad en el precio de los combustibles permitirá evitar un impacto en el negocio de las compañías. Meoni indicó además que el Gobierno buscará avanzar en un reordenamiento de frecuencias de las 300 líneas de colectivos en Capital y el conurbano y que trabajará para mejorar el estado de la estación Terminal de Retiro. “Mi intención es volver a licitar y que se abra de nuevo la etapa de ofertas”, reveló, aunque luego aclaró que si ese proceso se extendiera mucho en el tiempo, el Estado se haría cargo del lugar. “Si eso requiere un tiempo demasiado largo y tenemos posibilidades y capacidad jurídica de intervenir y tomar posesión de la terminal, lo haremos”, aseguró, aunque aclaró que primero hay que resolver el laberinto jurídico en el que está la concesión de la terminal.
El último aumento en colectivos y trenes fue aplicado en marzo durante el gobierno de Mauricio Macri. El boleto mínimo de colectivo aumentó entonces 9 por ciento y pasó a costar 18 pesos en los recorridos de menos de 3 kilómetros. Aquella fue la tercera suba aplicada en el año ya que se decidió concentrar los incrementos en el primer trimestre para luego dejar los valores sin cambios durante la campaña electoral. En esos tres meses el ajuste acumulado fue de 38,5 por ciento y en doce meses llegó al 125 por ciento frente a una inflación de 51,3 por ciento registrada en el mismo período.
En los ferrocarriles Roca y Belgrano Sur la tarifa mínima pasó entonces de 7 a 7,75 pesos (10,7 por ciento). En las líneas Mitre, Sarmiento y San Martín trepó de 11,25 a 12,25 pesos (8,8 por ciento). En el Belgrano Norte aumentó de 6,25 a 6,75 pesos (8 por ciento) y en el Urquiza de 7,25 a 8 pesos (10,3 por ciento). Esos ajustes llevaron la suba interanual en algunos casos al 266,6 por ciento, pero desde entonces no ha habido cambios.
El gobierno confirmó además este jueves que se mantienen los beneficios de la tarifa social. Los titulares de la Asignación Universal por Hijo, jubilados, pensionados y trabajadoras domésticas así como los beneficiarios de los programas Argentina Trabaja y Ellas Hacen siguen accediendo a la tarifa social que les permite pagar el 45 por ciento de las nuevas tarifas, y además tienen los mismos beneficios del sistema integrado para viajes múltiples de la Red SUBE. Por el sistema de tarifa integrada quienes viajan más siguen pagando menos ya que se combinan, por ejemplo, colectivo, tren y subte van a pagar 50 por ciento menos en el segundo viaje y 75 por ciento menos a partir del tercer viaje.
