Está acordado: serán subas del 4% cada una. De esta manera, se llega a un 45% de aumento durante el 2019.
Aunque todavía no salió la aprobación oficial del gobierno, las empresas de medicina prepaga aumentarán el valor de sus cuotas en septiembre, octubre y noviembre. De esta manera, la suba rondará el 45 por ciento durante 2019 y el 57% en los últimos doce meses. El incremento en las facturas de septiembre ya estaba anunciado y será del 6%, mientras que los aumentos en octubre y noviembre serían del 4%, como ya comenzaron a avisar algunas prepagas a sus clientes, más allá de que esté pendiente la Resolución de la Secretaría de Salud, que se espera sea publicada en el Boletín Oficial en los próximos días.
Cabe recordar que este año las prepagas recibieron permiso para aumentar los planes el 5% en febrero; 7,5% en marzo; 5,5% en julio; 6% en agosto y otro 6% el mes que viene. El año pasado, además, había terminado con alzas del 8% en octubre y del 8,5% en noviembre. Teniendo todo eso en cuenta, los dos nuevos aumentos que empezaron a notificar las empresas serían el sexto y el séptimo de 2019.
«Los aumentos se habían acordado previamente a las PASO, por el impacto que tiene en los costos del sector la actualización salarial de 34% acordada en las paritarias (con ATSA, la Asociación de Trabajadores de la Sanidad)», explicó al portal Infobae Ricardo Lilloy, presidente de la Cámara de Entidades de Medicina Privada de la Argentina (CEMPRA).
Por otra parte, a partir del impacto de las últimas medidas económicas y de la reciente devaluación post PASO, las cámaras que agrupan a las empresas del sector están manteniendo reuniones con la Secretaría y la Superintendencia de Salud para solicitar otras medidas que puedan reducir sus costos.
«Se está hablando de la eliminación del IVA en artículos importados y también se está negociando con las cámaras de laboratorios un posible congelamiento de los precios de los medicamentos de alto costo. Hay una sesión permanente para buscar acciones que tiendan a restablecer el equilibrio de la ecuación económica que tienen las obras sociales y las prepagas», comentó Lilloy.
