El hecho ocurrió en La Plata. El detenido estaba cumpliendo su condenada por un homicidio cometido en 2018

Un preso, que era sometido a un peritaje médico en una alcaidía de La Plata, consiguió fugarse este viernes después de tomar del cuello a una perito y balear en una pierna a un efectivo del Servicio Penitenciario Bonaerense que lo custodiaba.

A pesar de esta cinematográfica fuga, luego de dos horas de búsqueda fue recapturado, según informaron fuentes policiales.

El hecho ocurrió a las 16.50 en la calle 41, entre 119 y 120 de la capital bonaerense, adonde el recluso Damián Emiliano Banegas (19) había sido trasladado procedente de la Unidad 45 de Melchor Romero por dos custodios.

Una médica lo empezó a revisar para constatar unas escoriaciones que había sufrido en el penal a raíz de una pelea con otros presos ocurrida días atrás y le pidió al cabo del Servicio Penitenciario que había entrado con él que le quitara las esposas, relató a la agencia Télam un vocero.

En ese momento, mientras otro custodio estaba afuera, Banegas tomó del cuello a la médica legista, la empezó a zamarrear, le tiró de los pelos, la arrojó al piso y posteriormente comenzó un forcejeo con el penitenciario, a quien golpeó y le sustrajo el arma reglamentaria, una pistola Bersa calibre 9 milímetros.

El preso le efectuó dos disparos al efectivo, quien resultó herido en la pierna derecha, mientras que la médica logró refugiarse en una oficina y resultó ilesa.

Banegas salió a la calle, se subió a una moto y empezó a escapar pero otro penitenciario que lo vio le cruzó una camioneta y lo hizo caer, detallaron las fuentes.

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El preso siguió con su raid e hizo bajar a un automovilista de su vehículo y se escapó en él hasta el barrio San Carlos de La Plata, donde protagonizó algunos incidentes de tránsito y esta noche fue detenido en la calle 144 bis, entre 33 y 34.

Fuentes del SPB indicaron que se abrió un sumario para investigar si fue correcta la actuación del cabo y destacaron que es «inusual» que a un preso peligroso como este un profesional le haga quitar las esposas.

Además, indicaron que Banegas estaba preso desde el 12 de noviembre de 2018, cuando junto a un cómplice intentó robar una pizzería del centro platense y se enfrentó a tiros con el dueño del local y su hijo.

A raíz de ese hecho, el joven recibió cuatro disparos distribuidos en un glúteo, en el tórax y en sus manos.

En el enfrentamiento también resultó herido de bala en uno de sus brazos Hugo Serra, el dueño de la pizzería, y su hijo, en una pierna.

Desde entonces, Banegas permanece detenido y ya había intentado fugarse el 1 de abril último cuando fue trasladado al área sanitaria de Tribunales también para unas curaciones.

En esa ocasión, se lo conducía a un móvil y comenzó a forcejear para sacarse las esposas y logró correr 100 metros hasta que lo pudieron atrapar mientras pegaba cabezazos y puntapiés a los efectivos.

En tanto, dentro de la Unidad 45, el 14 de mayo se negó, con un elemento contundente, a ingresar al pabellón mientras gritaba «Yo no voy a entrar, sacame de acá, estoy re loco», por lo que se debió realizar un disparo de estruendo para resolver la situación.

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