Cecilia Califano asistía a un templo budista de Flores. Durante un viaje al país asiático, fue atacada sexualmente por Daisuke Nakayama en un hotel. Pide que la Justicia local colabore con las autoridades orientales

En su búsqueda de justicia, una víctima de abuso sexual ya recorrió más de 18 mil kilómetros. Es el caso de Cecilia Califano, una mujer que formaba parte de un templo budista del barrio porteño de Flores, denunció a su sacerdote ante el Poder Judicial local y para hacer frente a las demoras decidió radicar otra causa en Japón, país en el que ocurrió el hecho, cuyas autoridades empezarán a investigar ahora el episodio.

Se trata de un hecho muy similar al de la actriz Thelma Fardin, quien interpuso un expediente por el mismo motivo contra Juan Darthés ante las autoridades de Nicaragua. Es por esto que el abogado defensor de la víctima, Jaime Acosta, exige que los miembros de la justicia argentina presten colaboración con sus pares del país asiático para que la verdad salga a la luz.

El imputado es Daisuke Nakayama, reverendo del templo Nichiren Shoshu ubicado en Avenida Carabobo al 200, a quien Cecilia denunció penalmente por abuso sexual en Argentina -causa que está en etapa de apelaciones- y ahora en Japón, pero también pesa una por trata de personas contra él y la organización, generada a partir de una denuncia anónima que derivó en el expediente Nº 9660/2018 por explotación sexual, impulsada por la titular de la Fiscalía Criminal y Correccional Federal Nº 10, Paloma Ochoa, ante el Juzgado Federal y Correccional Nº 1 de María Servini.

Mirá También:  Dyango llegará a Córdoba y tocará con su hijo Marcos Llunas y su nieto Axel: fecha y entradas

El religioso fue guía espiritual de Cecilia durante 11 años en el templo de Flores, pero el mentor aprovechó una peregrinación en Japón para propasarse. En la causa consta que, tras llegar al hotel, el hombre le pidió permiso para entrar a su habitación y manifestarle una inquietud.

“El reverendo se queda dormido en la cama y al quererlo despertar, la toma del cuello y comienza a tocar su cuerpo hasta llegar a la cintura, levantando el vestido y tocando sus partes íntimas por encima de su ropa interior”, consta en el expediente el detalle de lo ocurrido aquel 29 de julio de 2017.

En diálogo con Diario Popular, Acosta, letrado defensor, reconoció que la presentación en el extranjero se hizo “por recomendación de las autoridades judiciales locales” y valoró la asistencia de la embajada, puntualmente de su colega Pérez Mena, así como de dos ONG’S importantes de aquel país, Human Rights Now y TELL.

“Se hizo la denuncia contra el reverendo por abuso sexual en la estación central de Takanawa. Ahora están disponiendo medidas de investigación en Japón y gracias a las gestiones constituimos domicilio en la embajada de allá, con un vínculo y un diálogo constante”, valoró el profesional.

A continuación, detalló que “el consulado extendió un certificado de la denuncia y ahora estamos esperando que la justicia local solicite las actuaciones certificadas de la justicia de Japón y viceversa”. Por ejemplo, señaló: “Cecilia ya declaró en Cámara Gesell en la causa sobre trata y está la transcripción desgrabada. La idea es no revictimizarla, tratar de evitar que vuelva a declarar, porque esto afectó mucho su salud”.

Mirá También:  La SADECH cumple 15 años

En cuanto a los siguientes pasos, el abogado aseveró que “no se considera un delito de lesa humanidad y entonces no hay un mecanismo de derecho internacional que conjugue todo, pero es un impulso para ambas denuncias”, mientras se esperanzó: “Esperemos que las dos jurisdicciones empiecen a colaborar y sea un impulso”.

Por otra parte, afirmó que “ya hay otras denuncias contra esta organización por abuso sexual en Japón”, aunque aclaró que son “contra otros sacerdotes, que tienen el mismo estatus que Nakayama”. Mientras tanto, Cecilia y su madre siguen apartadas del templo. “A ella la excluyeron totalmente y encima la hostigan desde las redes sociales. Pero también se metieron con su madre, que está evaluando iniciar acciones legales por calumnias”, reveló Acosta.

Deja un comentario

You May Also Like

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *