Para encontrar este remanente de una antigua supernova llamado DEM L 249 o SNR J053605-703826, CAL 61 e incluso RX J0536.1-7039, tenemos que dirigirnos a la constelación de Mensa (introducida por Nicolas Louis de Lacaille bajo el nombre de Mons Mensae, en honor a la montaña de la Mesa en Sudáfrica, un lugar histórico en observación astronómica.
El objeto reside dentro de la Gran Nube de Magallanes, una pequeña galaxia satélite de la Vía Láctea a sólo 160 000 años luz de distancia de la Tierra.
“La Gran Nube de Magallanes es un laboratorio natural ideal donde los astrónomos pueden estudiar el nacimiento, la vida y la muerte de las estrellas, ya que esta región está cerca, orientada hacia la Tierra y contiene relativamente poco polvo interestelar que absorbe la luz”, dijeron los astrónomos del Hubble.
Los astrónomos creen que el remanente DEM L 249 fue creado por una supernova de Tipo Ia durante la explosión de una enana blanca.