El telescopio Zwicky Transient Facility (ZTF) ubicado cerca de San Diego, California (EE. UU.), escanea cada dos noches, millones de estrellas en busca de objetos celestes que muestren un comportamiento inusual. Ahora, un equipo de investigadores afirma haber encontrado lo que parece ser un púlsar y una pequeña estrella que se orbitan entre sí más rápido de lo que jamás habíamos visto. Los científicos diseñaron un algoritmo que encuentra objetos que se vuelven mucho más brillantes o mucho más tenues en el transcurso de 80 minutos. Aquí es donde entra nuestra protagonista: su brillo varía en un factor de 13 cada 62 minutos. Algo estaba pasando aquí.

 

Un baile mortal

El púlsar, conocido como ‘viuda negra’ en astronomía, está canibalizando poco a poco a su compañera y consumiendo su materia y energía. Así, el destello de una estrella cercana llevó a los astrónomos del MIT a un nuevo y misterioso sistema a 3 000 años luz de la Tierra. Este nuevo «binario viuda negra» está, por tanto, protagonizado por un púlsar que gira rápidamente y que está dando vueltas a toda velocidad consumiendo lentamente una estrella compañera más pequeña, tal y como harían algunas arañas en el mundo natural.

«Las estrellas de menor masa donan material a sus estrellas compañeras pero sufren las consecuencias«, explican los autores en su estudio publicado en la revista Nature.

Aunque ya conocemos un buen puñado de viudas negras binarias en nuestra galaxia, este candidato a “binario viuda negra” , llamado ZTF J1406+1222, tiene el período orbital más corto identificado hasta ahora: cada 62 minutos. El sistema es único en el sentido de que parece albergar una tercera estrella lejana que orbita alrededor de las dos estrellas internas cada 10 000 años.

Mirá También:  ¡Insólito! Viajaba de Córdoba a Chascomús y la Policía lo acusó de tener una VTV trucha por ser de otra provincia

“Esta órbita de 62 minutos es notable porque no entendemos cómo las estrellas pueden entrar en una órbita tan estrecha. El proceso del púlsar que ablaciona a su compañero en realidad debería separarlos. Esto está empujando los límites de lo que creíamos posible”, explica Kevin Burdge, coautor del trabajo.

Deja un comentario

You May Also Like

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *